París, 16 de junio.

En su entrevista más larga desde que se naturalizó ruso por estar en desacuerdo con el gobierno francés, el actor Gerard Depardieu se definió como un hooligan simpático y ciudadano del mundo.

Cinco meses después de que el presidente Vladimir Putin le entregara el pasaporte, dijo al diario Le Journal du Dimanch que ahora es un actor franco-ruso cuya misión es tener más nacionalidades.

Tengo siete pasaportes de países que amo. Además, voy a solicitar el de Argelia, entre otros, agregó el actor, que se declaró un hombre libre y ciudadano del mundo.

En diciembre, Depardieu protagonizó numerosos titulares tras anunciar que renunciaría a la ciudadanía francesa tras de que el primer ministro, Jean Marc Ayraul, supuestamente tachara de patética su intención de trasladarse a Bélgica.