Cultura
Ver día anteriorLunes 24 de septiembre de 2012Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Mañana inaugura muestra en Galería 10/10

Cuando retrato a mi padre olvido cualquier lazo: Álex Castro

Afirma que el líder de la revolución cubana está bien de salud y sigue trabajando

Foto
Retratos tomados por Álex Castro en 2010 (izquierdo) y 2011.
Foto
Álex Castro es hijo y fotógrafo oficial del líder de la revolución cubana; sin embargo, asegura en entrevista que ese lazo no lo ha ayudado a conseguir sus metas. Sobre el trabajo que realiza para su padre, cuenta: Le gustan las fotos, pero no posa; es fotogénico, como demuestran los dos retratos que se observan en la página, tomados por él en 2010 (izquierdo) y 2011. En la muestra, que se inaugura mañana, se presentan 71 trabajos de Castro Soto del Valle; 20 de las imágenes son de la exposición El rostro de la historia, que estuvo en la Feria del Libro de Saltillo, y las demás ejemplifican los otros temas de los que se ocupaFoto María Luisa Severiano
 
Periódico La Jornada
Lunes 24 de septiembre de 2012, p. a10

Álex Castro se inició en la fotografía cuando era niño. “Era como un pasatiempo. Cuando eres niño repites las cosas de los mayores: vemos un avión y decimos ‘voy a ser piloto’, o vemos un médico y decimos ‘voy a ser doctor’. Fue una cosa como de juego y me fue gustando. Después me cautivó”, dice en entrevista el fotógrafo cubano con motivo de la exposición que inaugura este martes en la Galería 10/10, en Polanco, donde también se presentará el libro Fidel.

En la muestra se presentan 71 trabajos de Castro Soto del Valle (La Habana, 1963), 20 de las imágenes son de la exposición El rostro de la historia, que estuvo en la Feria del Libro de Saltillo; las demás son un ejemplo de otros temas de los que se ocupa: ballet, deportes, moda, paisajes. El libro, en tanto, reúne el trabajo de cinco fotógrafos en torno al ex presidente y líder de la revolución cubana Fidel Castro, padre del fotógrafo, que van de 1955 a la fecha.

Después de aficionarse a la fotografía de forma autodidacta siendo un niño y con una cámara soviética –la cual todavía conserva, aunque no las fotos que hizo en ese entonces– Álex Castro abandonó la captura de imágenes para estudiar tecnología electroquímica. En los años 90 tuvimos una crisis muy grande en Cuba y todo se volvió muy difícil. Dejé la fotografía para dedicarme a sobrevivir como todos los cubanos. Trabajé en muchas cosas, incluso en agricultura, en construcción, en todo lo que pude.

Fue en 1998 cuando comenzó a trabajar en la televisión y retomó la fotografía. A partir de ahí ya la tomé en serio. Es mi profesión, es como muchas otras. Se puede vivir de la fotografía de arte o de prensa, dedicarte a hacer fotos de 15 años, de bodas, o fotos en el estudio, de moda. Actualmente me mantengo haciendo uno que otro fotorreportaje, pero estoy más adentrado en la fotografía de arte, de la moda.

Fotógrafo oficial de Fidel Castro, Álex subraya que ser hijo del dirigente cubano no me facilitó nada. Te van dando educación y te mantienen, pero cuando se trata de trabajar ya no hay facilidades. Me ayudó a lograr buenas relaciones con las personas. Pero las cosas materiales uno se las tiene que conseguir, dice al tiempo que muestra en su computadora algunas de sus fotografías: de paisajes, del Ballet Español de Cuba, del acto Arte y Moda, de Gabriel García Márquez al lado de Fidel Castro, en una visita que el escritor realizó hace un año o o dos, de Haití en 2011, de beisbol, y de Fidel Castro en su día a día.

“A él le gustan las fotos, pero no posa. Para hacerle una foto se mantiene haciendo su actividad. Se debe hacer sin molestarlo, y procurar que las fotos te queden lo mejor posible. Todas las personas tienen ángulos que no les favorecen, entonces se deben buscar los ángulos que sí.

Algunos gestos no son bonitos, por lo que trato de no tomarlos, y si los tomo, no los enseño, dice entre risas.

Fidel “es fotogénico, se concentra en lo que hace. Al final le ha gustado mi trabajo, tanto que prácticamente en los años recientes yo le he hecho la mayoría del trabajo fotográfico.

“Cuando le tomo fotografías olvido cualquier lazo, cualquier cosa, y me ubico en que soy fotógrafo y estoy haciendo mi trabajo.

Me ha dicho un montón de veces que alguna foto no le gusta, pero con el aprendizaje, la práctica, he ido conociendo sus preferencias. Al principio revisaba y me decía si le gustaba o no, ahora ya no.

Pregunta obligada es la salud del dirigente cubano. “A cada rato las agencias noticiosas lo dan por muerto, pero bueno. Lo que no se dice oficialmente en Cuba no es realidad. Está bien de salud, lógicamente ya se retiró de la vida política, de la vida pública, ya no es jefe de Estado, pero sigue trabajando y sigue con sus experiencias y conocimientos, que comparte: está escribiendo un libro, aconseja a las personas de gobierno, pero no ejercela política ni como jefe de gobierno; ya está retirado.

No ha dejado de ser el líder de la revolución cubana. Han sido muchos años como dirigente, y no sólo eso, sino acertadamentente, porque se puede dirigir y cometer un montón de fallos o errores; además hay errores que cuestan caro, pero no: él siempre ha dirigido con ética para hacerlo; se ha guiado por el pensamiento martiano y le ha salido muy bien.

Álex Castro también es autor del libro Haití: viaje al reino de este mundo y ha montado numerosas exposiciones individuales y colectivas, tanto en su país como en el extranjero. Trabaja con cámara digital desde hace varios años. “Por suerte aprendí con una análoga, pero ya pasé a digital porque es lo que hay actualmente en el mercado y son las más asequibles a la mayoría de los bolsillos. Los recursos no eran para seguir con la cámara analógica.

“Todavía hay teorías de que la cámara digital sustituye a la analógica, y hay gente que dice que no. Todavía hay algunos detalles que la cámara digital no ha podido superar respecto de la analógica, pero estamos en un momento en que el desarrollo digital es muy rápido, los cambios son muy violentos. Antes se podía tener una cámara análoga durante 10 años y los cambios con los modelos nuevos eran muy pocos. Pero con las cámaras digitales los cambios son vertiginosos.

“No tengo la menor duda de que dentro de cinco años las cámaras digitales superarán por completo a las cámaras analógicas.

“Fotografío todo lo que se pueda. Algunas cosas no me gustan mucho, hay algunas que hago por trabajo, pero a todo lo que me llama la atención le hago fotos. Ya después, con el tiempo, puedo elegir temas. Por ejemplo, hoy me interesan mucho los paisajes.

Para mí la fotografía, de cualquier tema, es la imagen que va a quedar para la historia. Muchas veces el ser humano es incapaz de ver los detalles, y yo digo que la cámara fotográfica tiene más visión que el ser humano a pesar de ser la copia de un ojo. La cámara llega a ser más perfecta.

Álex divide la fotografía en dos: la foto de arte y la que da para comer, en la que se te contrata, por ejemplo una fiesta de 15 años o una boda. Esa fotografía es la que me da para comer. No me gusta, pero hay que hacerla.

La inauguración de la muestra fotográfica y la presentación del libro Fidel son este martes a las 13 horas en la Galería 10/10 (Séneca 114, en Polanco).