Estados
Ver día anteriorMartes 28 de agosto de 2012Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Pobladores rescatan a detenidos; un herido

Presuntos abusos policiacos desatan riña en Michoacán

Causan destrozos a siete vehículos

La PGJE envía peritos

Ofrece edil cambiar al personal

Foto
Luego que 11 policías del municipio de Lagunillas, Michoacán, detuvieron a cuatro personas e hirieron a un ciudadano, la comunidad enardecida destrozó varias patrullasFoto agencia Esquema
 
Periódico La Jornada
Martes 28 de agosto de 2012, p. 33

Lagunillas, Mich., 27 de agosto. Más de 100 habitantes de la comunidad Huatzanguio dañaron seis patrullas y siete vehículos particulares al sacar de la presidencia municipal a jóvenes acusados de ingerir bebidas alcohólicas en la vía pública, a quienes policías llevaron detenidos, supuestamente los torturaron y les cobraron 500 pesos de multa.

A continuación, civiles y policías riñeron. Los agentes dispararon al aire en varias ocasiones y uno disparó en el hombro a Javier García Tovar, de 23 años de edad, quien fue llevado a un hospital del municipio de Huiramba y luego al hospital civil de Morelia.

Habitantes de Huatzanguio indicaron que cerca de las 18 horas del domingo los agentes municipales llegaron a su comunidad e intentaron llevarse a Saúl Sánchez, Juan Martínez, Ramón Martínez y Miguel Martínez, supuestamente porque estaban borrachos, pero éstos no les hicieron caso. Los uniformados dispararon al aire, pero no lograron intimidar a los jóvenes y se retiraron.

A las 22 horas, elementos de la dirección de seguridad pública municipal regresaron en dos patrullas y nuevamente intentaron llevarse a los supuestos ebrios, pero en esta ocasión, según testigos, entraron a viviendas y los sacaron a punta de pistola, y a patadas y puñetazos los subieron a las patrullas. Añadieron que los policías dispararon sus armas al aire y rociaron con gas lacrimógeno a particulares que trataron de evitar el arresto.

Pobladores de Huatzanguio acudieron a la presidencia municipal y se enfrentaron con agentes la madrugada del lunes; entraron a las instalaciones de seguridad pública y liberaron a los cuatro detenidos. Los agraviados dijeron que fueron torturados en una celda y mostraron huellas de golpes en cara, costillas y mandíbula, entre otros.

Por instrucciones del procurador estatal, Plácido Torres Pineda, este lunes llegaron el subprocurador Marco Vinicio Aguilera Garibay; el director de Averiguaciones Previas, Sidartha Reyna García, perito en criminalística; un químico, y un agente del Ministerio Público, al igual que varios grupos de la policía ministerial.

Once policías municipales, entre ellos su director, José Luis Niño Barriga, y el comandante Martín García de Salvador, fueron trasladados a las instalaciones de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE). Personal especializado en servicios periciales y química practicó a los uniformados pruebas de rodizonato de sodio y balística, para saber si dispararon.

En las primeras diligencias se constató que en el patio del ayuntamiento estaban las patrullas 01-268, 00-047, 01-496 y 01378, así como una camioneta Navigator azul, con placas PHH-52-58. Todos los vehículos tenían parabrisas, medallones y ventanas rotos, y en el suelo había piedras y palos con que los inconformes golpearon las unidades.

Por la madrugada, se observó que dentro del estacionamiento de la alcaldía había dos patrullas de diferentes municipios, con los números económicos 629 y 1295. Horas más tarde las llevaron a sus localidades.

Al mediodía, el presidente municipal, Pedro García Chávez, emanado de la coalición formada por los partidos de la Revolución Democrática, del Trabajo y Movimiento Ciudadano, declaró a la prensa que hasta la mañana del lunes no supo de lo ocurrido. Más de 100 habitantes de Huatzanguio protestaron fuera de la alcaldía y aseguraron que los policías municipales cometen atropellos no sólo por la noche, sino también de día, allanan viviendas, cometen detenciones arbitrarias y robos.

La PGJE solicitó a la Secretaría de Seguridad Pública de Michoacán que vigile Lagunillas mientras el presidente municipal y la población llegan a un acuerdo. El alcalde ofreció cambiar al personal de seguridad pública a cambio de que los ciudadanos acaten la norma que prohíbe ingerir bebidas alcohólicas en la vía pública.

Los inconformes sostuvieron que los policías locales les advirtieron que si seguían protestando amanecerían colgados de los puentes, e indicaron que han informado al alcalde de estos atropellos, pero ha hecho caso omiso.

(Con información de la agencia Esquema)