Manila. El campeón de boxeo Manny Pacquiao, pese a su estatus de icono nacional filipino, no se librará de las investigaciones fiscales en curso, afirmó el gobierno de su país. El secretario de Finanzas, César Purísima, afirmó que sólo hace su trabajo al pedir a Pacquiao, uno de los deportistas mejor pagados del mundo, que informe sobre sus ganancias a la Oficina de Rentas Internas. Pacquiao mostró su enfado con el gobierno por la polémica en torno a su estado fiscal y reclamó daño a su imagen. El pugilista, considerado el mejor del mundo kilo por kilo, quien también participa en política, declaró a finales de 2010 ingresos por 26.3 millones de dólares, lo que lo convirtió en el miembro más rico del parlamento filipino. Según la revista Forbes, Pacquiao gastó 7 millones de dólares en su campaña electoral en 2010 y ganó 35 millones de dólares por sus dos combates contra Joshua Clottey y Miguel Cotto. Pacquiao, con un palmarés de 54 victorias, tres derrotas y dos empates, defenderá su título welter de la OMB contra el invicto estadunidense Timothy Bradley, el 9 de junio en Las Vegas.