Pese a que la Iglesia católica ha negado categóricamente que la visita del papa Benedicto XVI a México tenga trasfondo político, y que investigadores ligados a ésta también coincidan con esa tesis, en los hechos sí lo tiene y lo harán valer, aseguró Consuelo Mejía, directora del Católicas por el Derecho a Decidir (CDD).

En entrevista, precisó que la visita de Joseph Ratzinger al país, a partir del 23 de marzo próximo y hasta el 26; es decir, días antes de que acabe la veda electoral, es perjudicial para el proceso democrático, porque será utilizada políticamente por los grupos de derecha.

A su vez, Jorge Traslosheros, director editorial de la revista católica Vida Nueva México, sostuvo que el Papa no viene a reivindicar a nadie ni a favorecer proyectos políticos de dudosa legitimidad, viene a confirmarnos la fe para que seamos, como Iglesia, portadores del evangelio en México y América Latina.

En tanto, María Teresa Nicolás, directora de posgrados de Comunicación de la Universidad Panamericana, ligada al Opus Dei, aseguró que el papa Benedicto XVI, además de ser un líder religioso, es la voz autorizada de Cristo para uno de cada seis seres humanos del mundo, el cual también ha sido reconocido por anglicanos y protestantes como vocero válido.