La ausencia del secretario de Educación, Alonso Lujambio, no ha impactado las negociaciones salariales con el sindicato magisterial. Las cosas caminan como cuando él estaba y los más de 17 mil millones de pesos de los acuerdos económicos en las revisiones de los pasados tres años no se han entregado a la organización encabezada por Elba Esther Gordillo, sino a los gobiernos estatales, manifestó Juan Manuel Armendáriz, integrante del Colegiado Nacional de Relaciones, Vinculación y Organizaciones Adherentes del gremio de maestros.

Luego de que La Jornada publicó que de 2009 a 2011 el gobierno de Felipe Calderón entregó 17 mil 397 millones de pesos al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) como parte de los convenios alcanzados en las negociaciones salariales para distintos programas, Armendáriz Rangel comentó que dichos recursos –no negó el monto– no pasan por el sindicato, pero son en beneficio de los profesores.

El programa de carrera magisterial se rige por una comisión bipartita, integrada por la Secretaría de Educación Pública y el SNTE, la cual dictamina qué trabajadores obtienen ese beneficio, subrayó.

Respecto del programa de mejoramiento de infraestructura y mantenimiento de escuelas de educación básica, que cada año mencionado recibió más de 3 mil millones de pesos, argumentó que el sindicato se preocupa por que los planteles estén en las mejores condiciones. Por ello, apuntó, demanda al gobierno federal mayor presupuesto para ese rubro, pero eso no quiere decir que los recursos se entreguen al SNTE.

Consideró que desde hace años se ha ejercido una especie de campaña en contra de esa organización, la cual podría atribuirse al tema electoral, entre otros. En relación con las negociaciones salariales con la dependencia, indicó que las cosas caminan como cuando estaba Alonso Lujambio, en términos de comunicación, diálogo y agendas.