Cultura
Ver día anteriorMiércoles 29 de febrero de 2012Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

A 30 años de inaugurado, el recinto es sometido por primera vez a cirugía mayor

El museo Tamayo sigue cerrado; avance de 50% en su ampliación

Será reabierto en mayo con una magna retrospectiva del pintor, adelanta su directora, Carmen Cuenca

La idea es tener al artista de diferentes maneras para conservar la viveza del inmueble

Foto
Vista parcial del Museo de Arte Contemporáneo Internacional Rufino Tamayo, donde se realizan trabajos de reacondicionamientoFoto Cortesía del museo
 
Periódico La Jornada
Miércoles 29 de febrero de 2012, p. 4

Los trabajos de ampliación del Museo de Arte Contemporáneo Internacional Rufino Tamayo, los primeros que se realizan en sus 30 años de funcionamiento, tienen un avance de 50 por ciento.

El recinto cerró por completo sus puertas en agosto de 2011 para someterse a cirugía mayor, que lo hará crecer mil 900 metros cuadrados. Se prevé que será a finales de mayo cuando las nuevas instalaciones estén listas para recibir el mobiliario y prepararse para su gran reapertura, quizá en pleno verano, con una magna retrospectiva del pintor Rufino Tamayo (1899-1991) –fundador a su vez de La Jornada, gracias a su generosa aportación.

La inversión para esa ampliación es de alrededor de 84 millones de pesos, provenientes del sector privado (por conducto de la Fundación Olga y Rufino Tamayo) y del Estado, aportados por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes y el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA).

El proyecto arquitectónico y de ingeniería, a cargo de Teodoro González de León (DF, 1926), quien diseñó el museo a principios de los años 80 del siglo pasado en coautoría con Abraham Zabludovsky (1924-2003), expandirá el lado oriente del recinto, además de remodelar las instalaciones existentes.

Las salas de exhibición contarán con 692 metros cuadrados más; las oficinas y un nuevo espacio para impartir talleres tendrán 340 metros cuadrados adicionales y las áreas de museografía y mantenimiento, 238 metros cuadrados extras.

La bodega también crecerá y por fin se tendrá una buena cafetería. En total, el nuevo museo Tamayo tendrá una extensión de casi 7 mil metros cuadrados, suficientes para operar y crecer su acervo durante, al menos, otros 30 años, considera Carmen Cuenca, directora del recinto.

En entrevista con La Jornada, agrega que el área que se construye no será un chipote; el propio González de León ha explicado que la ampliación es tan sólo como si el inmueble extendiera un brazo.

Un par de años después de su inauguración, en 1981, se pidió a los arquitectos una ampliación del museo, la cual no se concretó. Hubo un par de peticiones más, que tampoco se llevaron a cabo. La cuarta fue la vencida.

Barco que flota en el agua

En aquellos años 80, la construcción del inmueble fue rápida y siempre quedó la idea de que era susceptible de ampliación, según recordó González de León en entrevista con La Jornada (8/2/10).

Aunque los permisos de construcción tardaron, una vez que dieron luz verde las autoridades del entonces Departamento del Distrito Federal (a cargo de Carlos Hank González), en sólo nueve meses se erigió el edificio que los arquitectos definieron como un barco que flota en el agua.

El museo, explicó su diseñador, está en un lago; su cimentación está calculada para que flote, por eso su ampliación no puede ser a lo alto. Ese fue el motivo también por el que no se pudo construir un auditorio subterráneo; se inundó en las primeras de cambio. No obstante, sin avisar a los arquitectos, durante la gestión de la directora Cristina Gálvez (1986-87) se incorporó un auditorio, el cual será ahora remozado.

Carmen Cuenca, quien dirige el museo Tamayo desde hace un año, agrega que la colección que el artista dejó como acervo es, básicamente, de arte internacional: “nuestra colección de cuadros realizados por el propio artista es muy reducida, sólo tenemos 10 obras. Lo fuerte es la colección de obras propiedad de Rufino Tamayo; pinturas de Francis Bacon, Fernando Botero, Eduardo Chillida, Wifredo Lam, Willem de Kooning, Fernand Léger, Marino Marini, Isamu Noguchi, Pierre Soulages, Antoni Tàpies, Pierre Aleshinsky, Jean Dubuffet y Pablo Picasso, entre otros; es la única colección de arte público internacional con la que cuenta México.

“La idea de la programación, que se podrá apreciar a partir de la reapertura, es tener a Tamayo de diferentes maneras. Por un lado con exposiciones, pero también como coleccionista. El artista donó piezas prehispánicas para un museo en Oaxaca, entonces, exploraremos esa faceta

Sí vamos a ver la colección del museo y sí vamos a ver a Tamayo para conservar la viveza del recinto. Son cinco proyectos los que trabajamos. Habrá siete salas, lo cual permitirá trabajar con mayor riqueza la curaduría.

No obstante el cierre del recinto, en las afueras del Museo de Arte Contemporáneo Internacional Rufino Tamayo las actividades culturales no se han detenido. Siguen los conciertos de jazz al aire libre y se imparten talleres infantiles. Además, con obra del acervo propio se organizaron exposiciones para los museos de Arte de Sonora, en Hermosillo, y de Arte Contemporáneo de Oaxaca.

Dentro del museo Tamayo, trabajadores van y vienen, ante el incesante ruido de taladros y máquinas de construcción. Las obras no han dañado el bosque que rodea el museo, pues se han restringido al perímetro que ocupaban el estacionamiento y los corredores.

El vestíbulo central está ocupado con cajas y anaqueles de la biblioteca, pues se restructura “toda la catalogación, ya que contaremos con un nuevo centro de documentación de la historia del museo y de los documentos de Tamayo que tenemos en el acervo. Estamos ante una gran oportunidad de repensar y reordenar mucho material después de 30 años.

“Trataremos de que Tamayo esté presente siempre. Por ejemplo, tenemos planeado, en el departamento de servicios educativos, difundir que alrededor de nuestro museo hay obra de él, y que si un día viene el público y no encuentra un cuadro, está un mural espléndido en el hotel Camino Real, otro en el Museo Nacional de Antropología o pinturas siempre expuestas en el Museo de Arte Moderno, el cual cuenta con un acervo del pintor más amplio que el nuestro.

Aquí podrán disfrutar una colección de arte contemporáneo internacional, pública, que no tenía el INBA antes de que se la donara el artista, concluyó Cuenca.

El Museo de Arte Contemporáneo Internacional Rufino Tamayo se encuentra en Reforma y Gandhi s/n, Bosque de Chapultepec. La cartelera de actividades paralelas por el cierre del recinto se pueden consultar en la página de Internet: museotamayo