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Mariana Pereyra presenta la exposición Botánica personal en el Museo de Arte Popular

Pintora deja el óleo por las técnicas artesanales para refrescar su trabajo
 
Periódico La Jornada
Viernes 20 de enero de 2012, p. 6

Para resolver las mismas formas, aunque con resultados diferentes, la artista Mariana Pereyra (DF, 1972) pasó de las técnicas de la pintura tradicional a las de la pintura popular mexicana.

Lo anterior se puede apreciar en Botánica personal, muestra que reúne nueve obras, cuya exhibición termina el próximo domingo en el Museo de Arte Popular (MAP), ubicado en la calle Revillagigedo 11, Centro Histórico.

Pereyra busca recrear jardines personales, pero ahora el óleo ha sido remplazado por popotillo, chaquira, plumas y estambre sobre cera; semillas y lentejuela bordada, así como figuras de cerería. Son materiales que han refrescado su trabajo.

El cambio coincidió con su ingreso hace tres años a la Universidad Autónoma de la Ciudad de México (UACM) para impartir el taller de artes populares, que la impulsó a profesionalizarme más en ese tipo de técnicas artesanales. Fue en el MAP precisamente donde conoció la técnica del popotillo, que da un resultado lineal a las composiciones, pues siempre le ha gustado jugar con la geometría, lo orgánico, las composiciones muy informales, pero con algún movimiento, nada muy rígido.

De hecho, en su estudio quedaron inconclusos algunos óleos, porque las técnicas populares son súper demandantes. El popotillo se pega fibrita por fibrita, después de cortar cada una. Aparte hay que aplicar la cera con un grosor adecuado, porque si es demasiado grueso el popotillo se sumerge, entonces, ya no se ve bien el trabajo. Saqué la cuenta de que por un pedacito de 8 x 8 centímetros me tardaba como una hora. Estudiantes de la UACM me ayudaron con algunas piezas.

No obstante las técnicas y los materiales empleados, y estar convencida de hacer arte, Pereyra dudaba de que su trabajo a lo mejor sería calificado de arte popular.

Sin embargo, “hace unos meses me encontré a José Miguel González Casanova, quien me hizo ver que ya hay muchísimos artistas que desde hace tiempo retoman lo que es lo hecho a mano, lo artesanal, lo que vuelven a hacer pasito a pasito con esta técnica de la vieja escuela.

“Cada vez –prosigue Pereyra– encuentro menos diferencias entre el óleo, el popotillo y demás materiales, pero de habérmelo preguntado hace cinco años, seguramente habría dicho que nada tiene que ver un mundo con el otro.”