Cultura
Ver día anteriorMiércoles 18 de enero de 2012Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Los fastos comenzarán en Ginebra, urbe que incineró sus libros y lo condenó al exilio

El mundo conmemorará a Rousseau en el tricentenario del pensador universal

Mañana se inaugura en esa ciudad un amplio programa artístico-cultural en honor del escritor, filósofo, pedagogo, músico y viajero

Anuncian actos en Brasil, Estados Unidos, Turquía y Japón

 
Periódico La Jornada
Miércoles 18 de enero de 2012, p. 7

Ginebra, 17 de enero. Ginebra, que quemó sus libros y lo condenó al exilio, se dispone a celebrar fastuosamente el nacimiento, hace 300 años, de Jean-Jacques Rousseau, su ilustre ciudadano, hombre del Siglo de las Luces y pensador universal.

El lanzamiento oficial de este acontecimiento, 2012, Rousseau para todos, tendrá lugar el jueves, cuando se inaugure un ambicioso programa que durante todo el año ilustrará las numerosas facetas del escritor, filósofo, pedagogo, músico y viajero que escribía sobre todos los temas.

Exposiciones, espectáculos, conciertos, filmes, paseos y coloquios terminarán en el aniversario del escritor, nacido el 28 de junio de 1712 en el 40, Grand-Rue de Ginebra, que ahora es un museo.

Vida errante y atormentada

El pensamiento de Rousseau, así como su influencia, serán discutidos en la Universidad de Ginebra en cursos públicos y examinados en una prometedora exposición titulada Vivo o muerto, siempre los preocupará.

Según su comisario, Alain Grosrichard, especialista del siglo XVIII y presidente de la sociedad Jean-Jacques Rousseau de Ginebra, este escritor “continúa preocupando en la actualidad; no deja dormir tranquilo, plantea cuestiones que siguen siendo actuales.

Desde el comienzo adoptó una posición de marginal; se presenta como un bárbaro que cuestiona radicalmente la civilización en la cual vive y despierta brutalmente a un siglo que se duerme en la ilusión de su percepción, dijo.

El individualismo, la búsqueda del materialismo que él criticó; también se aplican actualmente al malestar en nuestra sociedad, subrayó.

Foto
Jean-Jacques Rousseau (1712-1778)

Algunas temáticas exploradas por Rousseau serán tratadas mediante la mirada de jóvenes directores de cine. Bajo la dirección del cineasta Pierre Maillard, una colección de películas muy breves, La faute à Rousseau (La culpa es de Rousseau) se refiere a la desigualdad, la naturaleza, la educación, el amor, con las palabras del escritor en la realidad actual.

Por su parte, François Jacob, codirector de las festividades del tricentenario y director de la Biblioteca Rousseau, insiste en la pertinencia de sus ideas.

Es alguien que, sobre todo a nivel político, ofreció el marco intelectual necesario para el surgimiento de la sociedad en la cual vivimos, destacó.

En su tricentenario, la obra de Rousseau será celebrada en todo el mundo, tanto en Brasil como en Estados Unidos, donde se organizarán conmemoraciones, así como en Estambul y Tokio.

Jean-Jacques Rousseau, hijo y nieto de relojeros, huérfano de madre, abandonado por su padre a los ocho años, vivió sus 16 primeros años en Ginebra, antes de regresar en diversos momentos de su vida errante y atormentada.

Después de la publicación de su tratado de educación Emile, las autoridades ginebrinas, que temían su visión revolucionaria, lo condenaron al exilio en 1762. Sus obras fueron quemadas ante la alcaldía.

François Jacob destaca el sentimiento de amor y de odio del escritor hacia su ciudad natal. Abdicó de su ciudadanía ginebrina, pero toda su vida recordó con emoción las palabras de su padre: Jean-Jacques, ama a tu país.