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Reconoce el CPJ el valor de Javier Arturo Valdez Cárdenas por cobertura en zona de riesgo

Entregan premio a la Libertad de Prensa a corresponsal de La Jornada en Sinaloa

La niñez en México tiene su ADN tatuado de balas, fusiles y sangre

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Reconocimiento a Javier Valdez Cárdenas (izquierda)Foto La Jornada
 
Periódico La Jornada
Jueves 24 de noviembre de 2011, p. 22

Nueva York, 23 de noviembre. El periodista mexicano Javier Arturo Valdez Cárdenas, uno de los fundadores del semanario Ríodoce, que circula en Sinaloa, y corresponsal del diario mexicano La Jornada en esa entidad, recibió la noche del martes el Premio Internacional a la Libertad de Prensa otorgado por el Comité para la Protección de Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés).

El CPJ reconoce cada año a reporteros que se distinguen por su valor en coberturas en zonas de conflicto. Este año fueron cuatro los comunicadores galardonados: además de Valdez, Mansoor al-Jamri, del diario Al-Wasat, de Bahrein; Natalya Radina, del sitio de Internet Charter 97, de Bielorrusia, y Umar Cheema, del diario The News, de Pakistán.

He sido periodista estos 21 años y nunca antes lo he sufrido y gozado con esta intensidad, ni con tantos peligros. Donde vivo, Culiacán, Sinaloa, es un peligro estar vivo y hacer periodismo es caminar sobre una invisible línea marcada por los malos, que están en el narcotráfico y en el gobierno, un piso filoso y lleno de explosivos. Esto se vive en casi todo el país. Uno debe cuidarse de todo y de todos, y no parece haber opciones ni salvación, y muchas veces no hay a quién acudir, expresó Valdez en su discurso, luego de recibir el premio de manos de Mark Withaker, editor de la cadena CNN.

Manifestó que México vive una tragedia alimentada por el gobierno y los narcotraficantes.

La tragedia que vive México debe avergonzarnos: la niñez recordará esto como un tiempo de guerra, tiene su ADN tatuado de balas, fusiles y sangre, y ésta es una forma de asesinar el mañana: somos homicidas de nuestro futuro.

Controlar el negocio

Señaló que México y Estados Unidos no buscan erradicar el narco, sino controlar el negocio.

Ésta es una guerra, sí, pero por el control del narcotráfico; los ciudadanos ponemos los muertos, y los gobiernos de México y Estados Unidos las armas. Y ellos, los encumbrados, invisibles y agazapados, dentro y fuera de los gobiernos, se llevan las ganancias.

Valdez Cárdenas dedicó el premio a los periodistas valientes, así como a los niños y jóvenes que padecen la violencia cotidiana en México: He preferido darle rostro y nombre a las víctimas, retratar este panorama triste y desolador, estos pasos agigantados de tomar atajos hacia el Apocalipsis, en lugar de contar los muertos y reducirlos a números.

En el caso del periodista mexicano, el CPJ destacó en su comunicado que “en un país donde una extendida autocensura es consecuencia de la violencia de grupos criminales y cárteles de la droga, Valdez sigue cubriendo temas sensibles”.

El galardón entregado a Valdez Cárdenas se otorga apenas un mes después de que se distinguió a Ríodoce y a El Diario de Juárez con el prestigioso premio María Moors Cabot, que otorga la Universidad Columbia, con sede en Nueva York, a lo mejor del periodismo en el continente americano. Este reconocimiento es el segundo en importancia después del Pullitzer.

La ceremonia del CPJ se realizó en el hotel Waldorf Astoria de Nueva York, y fue conducida por la periodista Christiane Amanpour, de la cadena de televisión ABC. El comité distinguió también a Dan Rather por su trayectoria en defensa de la libertad de prensa y premió al editor Eynulla Fatullayev, honrado en 2009 mientras estaba encarcelado en Azerbayán y que fue liberado apenas este año, tras una intensa campaña internacional.

Valdez Cárdenas, con poco más de 20 años de experiencia periodística, es autor de los libros sobre narcotráfico Los morros del narco, Miss Narco y Malayerba, además del libro de crónicas De azoteas y olvidos, editado en Culiacán.