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Se entrevista en Guadalajara con su colega José Mujica, quien realiza visita de Estado

Respalda Calderón a Uruguay ante Francia

En el contexto de la cumbre del G-20 Sarkozy tildó al país sudamericano de paraíso fiscal

Enviada
Periódico La Jornada
Jueves 17 de noviembre de 2011, p. 23

Guadalajara, Jal., 16 de noviembre. El presidente Felipe Calderón dio razón a Uruguay en el diferendo que mantiene con el mandatario de Francia, Nicolas Sarkozy, al señalar que el país sudamericano fue considerado injustamente paraíso fiscal, en relación con la aseveración del francés.

Como presidente del Grupo de los 20 (G-20), Calderón prometió a su par José Mujica, surgido de una coalición progresista y de izquierda, luchar por la transparencia tributaria en un ámbito estrictamente técnico, fuera de toda consideración política que afecte la imagen y ponga en duda el compromiso de los países en su lucha contra la evasión fiscal.

La relación entre Uruguay y Francia se tensó a raíz de que en la Cumbre del G-20 Sarkozy incluyó a Uruguay en una lista de paraísos fiscales, presuntamente por presiones de Argentina. De inmediato, el presidente Mujica convocó al embajador uruguayo en Francia a Montevideo para pedir explicaciones sobre el tema e incluso su gobierno pidió que Sarkozy ofreciera disculpas.

Con esta polémica como telón de fondo, Mujica efectuó su primera visita de Estado a México con la misión de conseguir el apoyo del ahora presidente del G-20. Sin aludir abiertamente al conflicto, Mujica comentó después de conversar con Calderón que sus no muy ceremoniosos huesos sienten los kilómetros de cada viaje cuando hay mucha distancia. Pero este es un viaje de un cansancio que me deja muy contento.

De hecho, Pepe Mujica –como lo llamó su colega– recibió un trato deferente del gobierno mexicano, que le prestó un avión para trasladarse de Panamá a México y lo recibió en Jalisco y no en el Distrito Federal para evitar que sus problemas de salud se agravaran por la altitud de la ciudad.

Aunque en el almuerzo Calderón tuvo un lapsus al llamar a Mujica presidente de la República de Ecuador, lo que corrigió de inmediato, mientras él y los comensales se reían.

Gritar a los más grandes

A su llegada al Instituto Cultural Cabañas, Mujica recomendó que México no se aleje de otros hablantes del castellano en la región y exhortó a la unidad lationamericana, para que los más débiles defiendan sus intereses en un mundo donde la globalización no equivale a fraternidad, sino a que los más fuertes establecen sus parámetros.

En este continente nadie va a desconfiar del imperialismo uruguayo hasta por una razón de dimensiones, pero en este continente alguien tiene que gritarle a los más grandes, tiene la responsabilidad histórica de andar cerca y juntos, porque siendo los más grandes tampoco alcanza para las dimensiones que se están gestando en este mundo, comentó el presidente de izquierda.

Resaltó que México casi como nadie ha cultivado a lo largo de muchas décadas una política de brazos abiertos para todos los perseguidos del mundo ofreciendo su convivencia y exigiendo siempre una cosa elemental, que no se introduzcan en los pleitos internos de México.

Agradeció que el país acogió a muchos uruguayos durante la dictadura militar y por eso dijo tener un inmenso respeto y agradecimiento por las generaciones de luchadores que pasaron por aquí, que nutrieron a la universidad, construyeron cultura y después se desparramaron por América Latina.

Comentó que su delegación y él no son tan poetas ni tan desinteresados para recorrer tantos kilómetros, ya que los alberga el interés profundo de reforzar las relaciones comerciales con nuestro país sin buscar un negocio, sino una causa de lucha por la sobrevivencia.

El Presidente mexicano expresó su franca admiración por hombres universales comprometidos con la justicia, que no obstante ser perseguidos y oprimidos por ella han sabido salir adelante y liderar a sus pueblos en el cumplimiento de sus más preciados ideales, como es el caso del presidente José Mujica.

Con ello aludió a que Mujica, ex líder guerrillero tupamaro, sufrió tortura y 13 años de prisión bajo la dictadura militar.

Después de que ambos mandatarios presentaron sus respectivas comitivas y pasaron revista a la guardia de honor en el Patio Mayor, el mandatario le dio la razón a Mujica en el conflicto con Francia.

Aclaró que el Foro global sobre transparencia e intercambio en materia fiscal forma parte del Grupo de los 20, es una entidad neutral, de carácter técnico que no utiliza desde hace tiempo el término de paraísos fiscales –como en algún momento injustamente se hizo a Uruguay– para referirse a ningún país o jurisdicción.

Reconoció el enorme esfuerzo que Uruguay ha venido haciendo no sólo para suscribir compromisos, sino por haber avanzado en 10 de los 12 compromisos que forma parte del mismo.

También anunció que ambos países se coordinarán en la lucha contra el narcotráfico, porque la violencia no conoce fronteras y representa un desafío fundamental a los regímenes democráticos.

Después, en el almuerzo, Calderón resaltó que los dos países tienen al lado vecinos muy grandes y poderosos, pero han sabido abrirse paso. Calderón buscó resaltar su cercaníaa la ideas con Mujica y dijo sentirse identificado con la música de Alfredo Zitarrosa, que tenía prosa militante y poesía todavía más militante.