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Ambos gobernantes le desean pronta recuperación del cáncer

Hugo Chávez y Daniel Ortega se solidarizan con el ex presidente Lula
 
Periódico La Jornada
Lunes 31 de octubre de 2011, p. 22

Caracas, 30 de octubre. Los presidentes Hugo Chávez, de Venezuela, y Daniel Ortega, de Nicaragua, expresaron hoy por separado su solidaridad con el ex presidente brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, quien el sábado fue diagnosticado con cáncer en la laringe, enfermedad que, según médicos, podría provocarle problemas en la voz.

En nombre de todo el pueblo venezolano y desde la experiencia que he vivido al haber enfrentado una situación similar, quiero expresar, desde la hermandad que nos une al compañero Lula, mi hondo deseo de que el tratamiento al cual se someterá en las próximas semanas permita su pronta recuperación, señaló Chávez en un comunicado.

Lula, hermano, ¡viviremos y venceremos!, culminó el mandatario venezolano, adaptando la consigna que él mismo esgrime desde que lo diagnosticaron.

Luego de realizarse unos exámenes, Lula, de 66 años, fue diagnosticado el sábado con un tumor en la laringe y recibirá tratamiento de quimioterapia, comunicó el Hospital Sirio Libanés de Sao Paulo, adonde acudió el viernes por un dolor de garganta.

El presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, también expresó su solidaridad con Lula, a quien envió saludos.

Nuestra solidaridad para el hermano Lula. Estamos seguros que, tal y como lo indican partes médicos acerca del problema de cáncer que le afecta en la garganta, éste logrará ser superado.

Ortega recordó que el cáncer ha afectado al presidente venezolano, Hugo Chávez, al paraguayo Fernando Lugo y a la actual presidenta brasileña, Dilma Rouseff, que han logrado superar la enfermedad.

Lula podría tener problemas en el habla después de someterse al tratamiento de quimioterapia, según médicos citados hoy por el diario O Estado de Sao Paulo.

Los especialistas indicaron que, si bien en el caso del ex mandatario se optó por evitar la cirugía para preservar los órganos afectados, la quimioterapia, que comenzará el lunes y se prolongará por tres meses, sumada a un eventual tratamiento con radioterapia, puede perjudicarle la voz y el habla.