Opinión
Ver día anteriorMiércoles 29 de diciembre de 2010Ver día siguienteEdiciones anteriores
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México SA

Presumir empleos miserables

Máximo, dos salarios mínimos

¿Y el pacto de Chapultepec?

C

on tal de presumir, como sea, la creación de empleo en el sector formal de la economía a lo largo de 2010, al inquilino de Los Pinos se le olvidó detallar la desastrosa calidad de las plazas oficialmente generadas: son pocas respecto del tamaño de la demanda real, y el grueso de ellas (67.2 por ciento del total) apenas ofrece un ingreso de entre uno y dos salarios mínimos, es decir, de 56 a 112 pesos diarios, antes del majestuoso incremento al miningreso (2.3 pesos, también promedio, para 2011) aprobado el pasado 18 de diciembre por el Consejo de Representantes de la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos.

Haiga sido como haiga sido, se jacta Felipe Calderón, a lo largo de 2010 se ha generado empleo formal. En este contexto, el más reciente (noviembre pasado) Informe de la Dirección Técnica de la Comisión Nacional de los Salarios Mínimos (presumiblemente utilizado como base para acordar el incremento 2011 al miningreso) da cuenta de la cantidad y calidad de dichas plazas, con corte estadístico hasta el décimo mes del presente año. Así, detalla que en el periodo comprendido entre octubre de 2009 e igual mes de 2010 se observó que los mayores aumentos en la población cotizante correspondieron a trabajadores con percepciones de más de uno a dos veces el salario mínimo (475 mil 779 personas), lo cual significa que 67.2 por ciento de los que se incorporaron en ese lapso obtuvieron un ingreso de 56 a 112 pesos diarios, en el mejor de los casos. Le siguieron en importancia los incrementos que reportaron los estratos de más de dos a tres y de más de tres a cuatro veces el salario mínimo, con 77 mil 243 y 52 mil 535 trabajadores, respectivamente. Por su parte, el segmento de los trabajadores que percibieron un salario mínimo disminuyó su población cotizante en 5 mil 887 trabajadores. De cualquier forma, en esta última fracción del tabulador se registran a casi 6 millones de personas, de acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE).

A pesar de ello, el documento referido asegura que la información del IMSS permite observar la evolución de los trabajadores que cotizan con un salario mínimo a ese instituto. Así, en octubre de 2010, ese grupo de trabajadores se integró por 405 mil 858 cotizantes, cifra menor a la de un año antes, en 5 mil 887 asalariados (1.4 por ciento); asimismo, su proporción respecto del total de cotizantes fue menor a la del mismo mes del año anterior, al pasar de 3.1 a 2.9 por ciento. La población que cotiza con ingresos de más de uno y hasta dos veces el salario mínimo mostró un incremento de 10.7 por ciento, lo que significó 475 mil 779 cotizantes más en este rango de ingreso; su participación respecto del total se ubicó en 35.1 por ciento, es decir, 1.7 puntos porcentuales más que en el año anterior. Por su parte, los cotizantes con percepciones de más de dos veces el salario mínimo acusaron un crecimiento de 2.8 por ciento en el periodo interanual que se menciona y en términos absolutos significó 237 mil 591 trabajadores más; no obstante, su proporción respecto del total descendió 1.5 puntos porcentuales, al ubicarse en 62 por ciento.

Por entidad federativa, se observó que en octubre de 2010 aquellas con el mayor número de cotizantes permanentes de un salario mínimo fueron: Distrito Federal (92 mil 614 trabajadores), estado de México (35 mil 334), Jalisco (31 mil 69), Veracruz (27 mil 734), Tamaulipas (22 mil 677) y Puebla (17 mil 979). En conjunto, estas entidades concentraron 56 por ciento del total de cotizantes de salario mínimo. En octubre de 2009, esas mismas entidades habían agrupado 54 por ciento de los perceptores de ingresos mínimos, entre las que también destacó el Distrito Federal, con 21.4 por ciento.

Entre octubre de 2009 y el mismo mes de 2010, en 12 entidades federativas se reportó un aumento en el número de trabajadores perceptores de un salario mínimo; entre las que sobresalieron con los mayores crecimientos absolutos están: Distrito Federal (4 mil 662 cotizantes de un salario mínimo más), Tamaulipas (2 mil 480), Veracruz (mil 597), Baja California (mil 314) y Chihuahua (mil 113). En cambio, los estados que destacaron por registrar los descensos absolutos más relevantes fueron: Campeche (3 mil 809 trabajadores de salario mínimo menos), Nuevo León (2 mil 597), Guanajuato (2 mil 378), Quintana Roo (mil 917) y San Luis Potosí (mil 724).

En octubre pasado se registró que en el área geográfica C se localizó 50 por ciento de los trabajadores con percepciones mínimas, el resto se distribuyó en las áreas geográficas A y B, con 37.1 y 12.9 por ciento, respectivamente. Al comparar esta estructura con la de un año antes destaca el aumento de 2.9 puntos porcentuales en el área A, mientras que la C y la B disminuyeron 2.4 y 0.6 puntos porcentuales cada una. Por otra parte, al interior de cada área geográfica la participación de los perceptores de ingresos mínimos respecto del total de trabajadores asalariados cotizantes fue de 3.1 y 3 por ciento en las áreas geográficas A y C, respectivamente; en tanto que la participación de los asalariados cotizantes con ingresos equivalentes al mínimo en el área geográfica B fue de 2.1 por ciento.

Entre octubre de 2009 y octubre de 2010 los establecimientos en sus diferentes tamaños aumentaron su población cotizante; las unidades productivas que sobresalieron por aportar el mayor número de nuevas plazas fueron las de más de 301 y de 101 a 300 trabajadores, con 429 mil 157 y 143 mil 430 cotizantes más, respectivamente; le siguieron en importancia las empresas de 11 a 50 y de 51 a 100 trabajadores, las cuales generaron 61 mil 305 y 50 mil 921 nuevos puestos de trabajo, respectivamente. La menor participación correspondió a los micronegocios, de uno a 10 cotizantes, con 22 mil 670 trabajadores más. En octubre de 2010 estaban inscritos en el IMSS 812 mil 48 establecimientos que registraron a sus trabajadores en ese instituto.

Las rebanadas del pastel

En 2010, grandes consorcios mexicanos acumularon inversiones por más de 42 mil millones de dólares en Sudamérica, como si en casa sobrara. Entre ellos aparecen Telmex, Cemex, Bimbo, Coca-Cola Femsa, Grupo México (el de Pasta de Conchos), Vitro, ICA, Protexa y Pinfra (antes Tribasa). Sus dueños firmaron (2005) el llamado pacto de Chapultepec, por medio del cual se comprometieron (ante todo el bien de México), a impulsar el desarrollo del país, incrementar la inversión interna y aumentar la generación de empleo. Qué rápido olvidaron estos solidarios empresarios.