Con la exigencia de que el gobierno mexicano deje de promover falsas soluciones contra el cambio climático, y sea congruente con la supuesta posición de avanzada que mantiene hacia el exterior en materia ecológica, cientos de personas marcharon ayer por el Centro Histórico de la ciudad.

La movilización, denominada Caminata por el clima, fue convocada por una veintena de organizaciones ambientalistas, civiles y sindicales, y su objetivo fue demandar que los gobiernos de todo el mundo actúen con prontitud para frenar el calentamiento global.

Con la participación de unas 500 personas, que se movilizaron del Hemiciclo a Juárez al Zócalo, la manifestación exigió reducir el uso de combustibles fósiles, impulsar las energías renovables, frenar la deforestación, asignar recursos para la adaptación en los países más vulnerables al cambio climático, optar por la agricultura de bajo impacto y sin transgénicos, y recuperar la vida natural de los océanos.

Entre consignas como Vamos todos a luchar, porque el clima hay que salvar y Políticos, despierten, actúen por la gente, los inconformes caminaron por un tramo corto de avenida Juárez, para después dar la vuelta en Eje Central y tomar la calle 5 de Mayo, hasta la Plaza de la Constitución.

En un ambiente festivo, la marcha estuvo encabezada por un grupo de niños, seguidos por los contingentes de diversos colectivos civiles, como Greenpeace México, el Movimiento Urbano Popular, el Grupo de Estudios Ambientales y Bicitekas, entre otros.

Varios de los manifestantes hicieron una crítica al modelo de consumismo extremo que depreda los recursos del planeta, mediante disfraces hechos con botellas de plástico, tetrapack y otros desperdicios, como envolturas de comida chatarra y pedazos de listones.

Ya en la plancha del Zócalo, los oradores hicieron énfasis en su exigencia de que el gobierno mexicano sea congruente con la posición ambiental supuestamente de avanzada que promueve en el extranjero, e impulse de verdad un acuerdo ambicioso en la Cumbre de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP-16) que se está celebrando actualmente en Cancún.

El activista sudafricano Kumi Naidoo, director de Greenpeace Internacional, afirmó en entrevista que la marcha ayuda para demostrarle a los gobernantes que la sociedad civil está en movimiento y pendiente de estos temas, y consideró que a pesar de la oposición de varios gobiernos a reducir sus emisiones, se puede avanzar en este sentido a escala local, por ciudades o estados.

El tiempo está corriendo, y aunque para muchos países y regiones ya se ha acabado, todavía podemos hacer algo para evitar que el desastre por el calentamiento global sea mayor en el resto del mundo, confió.