Deportes
Ver día anteriorLunes 11 de octubre de 2010Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Pagarle a un stripper hubiera salido más económico para el espectáculo, dijo la ex corredora

El festival, sólo un show que no mejorará el deporte: Guevara

Las 48 horas de actividades en Paseo de la Reforma no producirán mejores competidores

Ana Gabriela confirma que no regresará a las pistas en Guadalajara 2011 ni a la Conade

 
Periódico La Jornada
Lunes 11 de octubre de 2010, p. 2

La ex velocista Ana Gabriela Guevara calificó como un “mero show” el Festival Olímpico del Bicentenario, dejó en claro que no regresará a las pistas para participar en los Juegos Panamericanos Guadalajara 2011, ni trabajará en la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), además de insistir en que los dirigentes nacionales no se atreven a decir cuántas medallas se pueden ganar en una justa internacional, porque no tienen parámetros para hacerlo.

Con la misma voz crítica de cuando brillaba en el horizonte del atletismo, la mejor atleta del país consideró que de ninguna forma las 48 horas del espectáculo deportivo en el Paseo de la Reforma, con varios de los mejores exponentes nacionales, crearán mejores competidores, ya que para lograrlo se requiere de un programa de trabajo, del que carece el país porque no se considera al deporte una política de Estado, como si lo hace China, por ejemplo.

Luego de lamentar que la gente no haya podido estar más cerca de los deportistas, porque así lo exigió el Estado Mayor Presidencial por razones de seguridad, destacó que las tres cabezas que manejan estas actividades: Conade, Confederación Deportiva Mexicana y Comité Olímpico Mexicano, no se ponen de acuerdo, además que en el pasado reciente el pensante, que se quedó en la pensantez (en referencia al ex director de la Conade Carlos Hermosillo), no pudo hacer nada para que se avanzara en el logro de resultados donde nos seguimos quedando cortos.

Tras estimar que Guadalajara 2011 no será un parteaguas para el deporte nacional –ya que todo lo que puedan lograr ya está cocinado y puesto en la mesa sin posibilidad de cambiarlo– dijo que para mejorar los resultados deberían ponerle aspas a la fosa donde se tiraron clavados ayer, desarmar todo el deporte para volverlo a reconformar. Sin un plan, seguiremos estancados.

Al término de la competencia de relevos que se corrió alrededor de la columna de la Independencia y que ganó el equipo de Ana acompañada de atletas del pasado, como Dionicio Cerón; del presente, Juan Luis Barrios, y paralímpicos, como Aarón Gordián, la ex velocista dijo que no hubiera invitado a Michael Phelps, porque si se trata de dar show, mejor hubieran traído a otro competidor.

“Si querían espectáculo hubieran invitado a alguien espectacular. Y no como cuando se quitó la playera (el viernes), que todo mundo le chifló. Sí está marcado, pero un stripper hubiera cobrado mucho menos (Phelps cobró 400 mil dólares)”, comentó la velocista, para agregar que los asistentes debieron conformarse con sólo ver parte de sus brazos cuando nadó, porque no había forma de ver nada por los casi 1.80 metros de altura de la alberca.

Afortunada fue Margarita Zavala, esposa del presidente Felipe Calderón, quien pudo acercarse a la pista y tras finalizar los relevos, se pudo tomar algunas fotografías con los participantes para luego darse tiempo de brindar algunas palabras a los medios de comunicación, cuando apuntó que debe hacerse del deporte una costumbre de vida y que los mexicanos debemos mostrar a los competidores de calidad en este tipo de festejos.

Foto
Ana Gabriela Guevara en la prueba de relevosFoto María Meléndrez Parada

Momentos antes, el ganador de ocho medallas doradas en Pekín 2008, Michael Phelps, brindó una clínica a nadadores nacionales infantiles y juveniles, a quienes les mostró en la alberca de 25 metros instalada sobre Paseo de la Reforma, los estilos dorso, mariposa y libre, una experiencia que más tarde describiría como muy importante, ya que habrá entre los participantes gente que pueda comprometerse a triunfar en el futuro.

Uno de los afortunados en compartir escasos minutos con el mejor nadador del orbe, fue el medallista paralímpico Juan Ignacio Reyes. Otros nacionales que pudieron acompañar a Phelps en los relevos acuáticos fueron Luis Escobar, Daniel Delgadillo, Patricia Castañeda, Alejandra González y Odeth Saldívar, entre otros, aunque el público apenas pudo ver y ni con telescopios de cartón podían mirar a los competidores.

Los que obtuvieron un recuerdo para toda la vida fueron quienes se formaron por algunos minutos para tener una fotografía autografiada del tritón.

En las otras pistas deportivas, desde las 9 horas dieron inicio diferentes actividades

Llamaron la atención las halteristas internacionales Damaris Aguirre, Luz Acosta y Carolina Valencia, quienes ejecutaron sobre la superficie improvisada levantamientos de pesas sencillos, además de otros competidores, promesas del futuro, emocionados por estar en plena calle practicando una disciplina que, por lo regular, se realiza en un espacio cerrado.

Hubo atletas que trabajaron por ratos como si estuvieran en sus entrenamientos, remeros que en aparatos simularon los movimientos de las competencias, tiro con arco en distancias de 30 metros.

Ya por la tarde, Phelps brindó una conferencia de prensa donde comentó que estaba muy contento de haber participado en el Festival Olímpico y que le gustaría regresar a México, pero que no será para los Juegos Panamericanos, porque justamente en esas fechas estará participando en el Campeonato Mundial de la especialidad a celebrarse en Shangai, China, al que Estados Unidos asistirá con su primer equipo.

Al preguntarle sobre algún escenario deportivo que se hubiera instalado en alguna otra avenida como ocurrió en esta ciudad, recordó que lo vio en Londres, cuando el traspaso de la estafeta olímpica a esa ciudad, cuando cerraron la calle donde se encuentra el Palacio de Buckingham.

Aunque la clausura estaba anunciada para las 18 horas, los organizadores la adelantaron. El arquero Juan René Serrano fue quien disparó de flecha que al dar en el blanco desató los globos que volaron por el lugar, decretando el cierre de las actividades, al estilo de la apertura de la justa veraniega de Barcelona 92.