Opinión
Ver día anteriorViernes 10 de septiembre de 2010Ver día siguienteEdiciones anteriores
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Economía Moral

Métodos y principios de medición de la pobreza multidimensional

Evaluación de los métodos desde la mirada de los principios

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os métodos de medición multidimensional de la pobreza (MMMP) se han puesto de moda entre los economistas y, por tanto, en las instituciones que ellos dominan. El día de ayer presenté una ponencia en la conferencia Internacional Diez años de Guerra contra la Pobreza que celebra los diez años de vida del Centro de Investigación sobre la Pobreza Crónica de la Universidad de Manchester (y le dice adiós, pues desaparece y queda sustituido por un nuevo instituto). Lo nuevo en la ponencia fue que, por primera vez, vinculé los Principios de Medición de la Pobreza Multidimensional que formulé entre 2007 y 2008 (véanse entregas de fines de octubre a principios de diciembre de 2008) con la Tipología de Métodos de Medición de la Pobreza que he trabajado desde los años noventa. Los Principios expresan mi experiencia de treinta años en la materia y todos ellos los he aplicado en el MMIP (Método de Medición Integrada de la Pobreza) que, en su versión mejorada (VM), trabajo desde 1992. Durante este tiempo las diversas tipologías que he formulado me han servido para ubicar al MMIP en el concierto mundial de métodos de medición de la pobreza. La crítica interna de estos métodos la he organizado con frecuencia con base en dicha tipología. A esta crítica interna (que se ubica en el mismo paradigma que el pensamiento objeto de la crítica) le he añadido recientemente (1987) la crítica externa a la que he denominado Crítica de la Economía Política de la Pobreza, en la cual he contrastado definiciones y mapas conceptuales de pobreza (la interconexión entre necesidades, satisfactores y fuentes de bien-estar o recursos que estructuran el proceso de in-satisfacción de necesidades) del pensamiento convencional y los de mi enfoque de florecimiento humano y pobreza; es decir, he confrontado el pensamiento criticado con un paradigma externo. Pero no había llevado a cabo, y ahora lo intenté por primera vez, una especie de crítica interna y externa a la vez, en la cual el pensamiento criticado lo confronto con los Principios que, si bien le son externos, están formulados a partir de una experiencia de medición de la pobreza desde el mismo paradigma en que éste opera.

Organicé los métodos de medición en unidimensionales, multidimensionales directos y multidimensionales combinados. Los confronté con los 10 Principios (de aquí en adelante Pr.) que he formulado:: 1.De totalidad (deben considerarse todas las necesidades, todos los tipos de satisfactores y todas las fuentes de bien-estar). 2. De comparabilidad del bien-estar (todos los indicadores deben re-valorarse en términos del bien-estar objetivo que generan). 3. De bien-estar objetivo marginal decreciente y de existencia de un máximo de bien-estar objetivo. 4. Del mínimo error (se debe hacer todo lo que disminuya los errores de medición). 5. De dicotomización generalizada (supera las dicotomías usuales que otorgan solamente valores 0/1, y constituye una variante replicable del procedimiento de cardinalización que he venido aplicando para convertir indicadores cualitativos en métricos). 6. De compensación (sostiene que situaciones por debajo de la norma en un indicador pueden ser compensadas por situaciones por arriba de la norma en otros). 7. Del carácter embrollado del concepto de pobreza, lo que significa que hablando de ésta no es posible separar los hechos de los juicios de valor. 8. Del respeto a la dignidad humana en la definición de los umbrales. 9. De la pobreza como parte del nivel de vida. Rechaza que deba usarse una escala especial para pobreza y sostiene que ésta constituye la parte baja de la escala del nivel de vida, por lo cual deben usarse los mismos indicadores para ambos conceptos. 10. De la simetría. Se refiere sólo al método de líneas de pobreza y establece que si se trunca la LP para que sólo se refiera a, por ejemplo, alimentación, el ingreso que se debe considerar es sólo el disponible en el hogar para tal fin y no el ingreso total. Encontré que en la exposición de los métodos de medición no hay elementos para valorar si respetan el Pr. 7, por lo que se confrontaron los 9 restantes con cada uno de los 14 métodos de medición de pobreza (véase gráfica). De la confrontación, se derivan las siguientes conclusiones:

Los métodos unidimensionales o de línea de pobreza reflejan lo que he llamado la solución monetaria que niega el problema de multiplicidad y heterogeneidad, origen de la necesidad de los MMMP y, por tanto, da un ponderador (peso) igual a cero a todas las fuentes de bien-estar diferentes del ingreso, violando el Principio del mínimo error. Su mapa conceptual reduccionista implica un rechazo radical del Pr. de totalidad. Muchas aplicaciones de métodos de LP (vg. las del Banco Mundial) también violan el Pr. de dignidad. Mientras la variante de CNA viola los seis principios que le son aplicables, la de presupuestos familiares respeta tres de ellos (véase gráfica).

Los cinco métodos multidimensionales directos incluidos conforman conceptualmente un par y un trío El par está formado por las dos variantes de NBI (necesidades básicas insatisfechas) y pertenecen a la tradición de América Latina (AL). Los tres miembros del trío pertenecen a la tradición Británica de conteo de carencias que se origina en las contribuciones de Peter Townsend (Índice de privación) e incluye los trabajos de Mack y Lansley y el de Alkire-Santos que comenté en la entrega anterior (03/09/10). En AL la variante Mejorada (VM) de NBI implicó un incremento muy fuerte del puntaje (que mide el respeto a los Principios) respecto a la variante original (VO) (de 1 a 7?). En la tradición Británica la tendencia parece la opuesta, ya que el IPAM (de 2010) no respeta ningún principio, mientras Townsend (1979) y Mack-Lansley (1984) respetan 2 y uno a medias.

3. Al evaluar los siete métodos combinados incluidos (todos los restantes), se forman tres grupos: A) Los violadores, constituidos por la variante original (VO) del MMIP, el conteo de doble corte de Alkire-Foster, y el de Pobres de Verdad Modificado del Coneval. B) El grupo intermedio, conformado por el de Pobres de Verdad y el mismo método pero en la variante consensual. C) El grupo de seguidores, formado por el MMIP variante mejorada (VM) y por el Índice de Progreso Social-Privación Vital de Desai. Los dos grupos extremos incluyen métodos de AL y de Gran Bretaña-EU, mientras el intermedio es sólo Europeo. La evolución de AL se mueve con evidente progreso, del MMIP-VO al MMIP-VM. Mientras Desai estaría reflejando la evolución Británica pero también la de AL y alcanzaría, junto con el MMIP, el más alto puntaje de todos los métodos analizados. En cambio, en el otro extremo, el método del Coneval muestra una regresión respecto a los Pobres de verdad europeos. Los métodos Europeos de Pobres de Verdad parecen encontrarse en un equilibrio estático.