Opinión
Ver día anteriorDomingo 4 de julio de 2010Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
 
Cosas del futbol

El fracaso de Maradona

Foto
Maradona y Messi, al finalizar el encuentroFoto Ap
S

e quedó a las puertas de ser entrenador de futbol y ahí, en el limbo de su frustración, Alemania dio un monumental repaso, desde el banquillo y en el terreno de juego, a una Argentina que se veía en la final del Mundial de Sudáfrica. Diego Armando Maradona no supo o no pudo sacar provecho de una hornada excelente de jugadores, comenzando por Lionel Messi, el mejor del mundo. Ante los alemanes Maradona dejó a su equipo sin un creador en la media cancha y lo partió en dos: los de atrás y los de adelante. Fueron 11 francotiradores enfrentados a un equipo tan joven como serio, compacto y creativo.

Horas después del fiasco de la albiceleste, España lo pasó muy mal frente a un equipo paraguayo bien plantado en el campo, con una disposición táctica –ahí está la mano de los entrenadores– que cortocircuitó a los ibéricos, sumidos en un mar de dudas hasta que en el minuto 83 el inevitable Guaje Villa perforó la tupida línea defensiva de los guaraníes.

Tuvieron sus oportunidades los conosureños, algo de lo que no pueden presumir sus vecinos argentinos, pero eso es lo que marca a un equipo bueno de otro regular. Hay que marcar cuando se presentan las ocasiones. No fue el caso, pero los paraguayos se fueron dejando una excelente impresión. Al inicio del campeonato casi nadie daba un centavo por ellos, pero ahí están, entre los ocho mejores del mundo.

Ya está la mesa de semifinales en la que sólo habrá un equipo latinoamericano –Uruguay–, que se enfrentará el martes a Holanda. Será un partido cerrado con todo y que los holandeses parten como favoritos. Los charrúas son un equipo solidario, aguerrido y disciplinado en el que sobresale Diego Forlán.

Los holandeses, como lo demostraron ante Brasil, no se quedan atrás a la hora de segar lo que encuentran a ras de pasto, de manera que veremos un duelo de toma y daca, con mayor posesión del balón de Holanda.

Alemanes y españoles –quienes ayer no hicieron jogo bonito ni fueron la furia roja– cumplirán el partido de revancha de la pasada final de la Eurocopa, ganada agónicamente por los hispanos.

Los teutones dejaron asustados a los argentinos desde el tercer minuto del juego, cuando marcaron su primer gol. También dejaron asustados a los españoles porque desplegaron un juego muy consistente que conjuga técnica y poderío físico. Es el segundo equipo más joven del Mundial después de Ghana, pero sus integrantes se comportan como veteranos de mil batallas.

El repaso táctico de Joachim Low a su colega Maradona ya quedó registrado en la historia del futbol. Quedó claramente marcada la línea que separa a un seleccionador de un seleccionador-entrenador. Los besos de ánimo de Diegodios a sus jugadores quedan en el ámbito de la motivación y la pose de jugador de póker del técnico alemán también, nada más que como ganador indiscutible.

Se equivocó Maradona, no supo rectificar y, entre otras cosas, hizo perder a su selección porque obligó a Messi a jugar de Maradona. La confusión borró del partido a la Pulga pese a sus pinceladas, siempre aisladas. La impotencia fue anulando lentamente la calidad de los argentinos que, cierto es, pelearon bravamente hasta el final.

Es una cura de humildad que Maradona no olvidará en su vida. Lo dijo en la conferencia de prensa posterior al juego. Lo dijo triste y digno: Es el peor día de mi vida.