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Plantean los partidos nuevas fórmulas para combatir al crimen organizado

El diálogo entre las fuerzas políticas debe empezar antes de la jornada electoral: Dia

Hacen llamado especial al PRI; no acompañarán al tricolor en la demanda contra Calderón

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Ricardo Cantú, coordinador nacional del PT; Luis Walton, presidente de Convergencia, Manuel Camacho Solis, Coordinador del Dia, y Jesús Ortega, dirigente del PRD, en conferencia de prensaFoto Maria Luisa Severiano
 
Periódico La Jornada
Sábado 3 de julio de 2010, p. 10

El diálogo entre las fuerzas políticas y el Ejecutivo federal debe iniciar antes de las elecciones del domingo, como una señal de que existe una verdadera determinación de detener la violencia, más allá de los cálculos estrictamente electorales, señalaron los dirigentes de los partidos integrantes del Diálogo por la Reconstrucción de México (Dia).

En conferencia de prensa, los políticos hicieron un nuevo llamado al diálogo nacional, específicamente al PRI, y propusieron, entre otros temas, nuevas fórmulas para enfrentar al crimen organizado y correctivos en la política económica que faciliten la generación de empleos, en particular para los jóvenes.

Jesús Ortega, del PRD; Ricardo Cantú, del PT; Luis Walton, Convergencia, y el coordinador de Dia, Manuel Camacho Solís, señalaron que la negativa del PRI a participar en este encuentro impidió que éste se concretara en la semana que concluye, a pesar de la urgencia del tema.

Ortega indicó que como Dia se han reunido con Luis Felipe Bravo Mena, secretario particular del encargado del Ejecutivo Federal, Felipe Calderón, dijo, para ajustar agenda y llamar al concurso y a la participación de todas las fuerzas políticas, lo que incluye a los priístas.

Camacho Solís resaltó que lo más importante es que el tricolor “tome la decisión final de asistir.

Informaron que no acompañarán al PRI en la demanda que interpuso en contra de Calderón ante el Instituto Federal Electoral porque ello contribuiría a complicar aún más el panorama electoral.

Despensas priístas en Oaxaca

Camacho Solís indicó que, para hacer denuncias primero hay que tener autoridad moral y responsabilizó al tricolor de los hechos de violencia ocurridos ayer en Oaxaca.

Sobre el tema, Ortega señaló que los priístas están concentrando en Zacatecas decenas de miles de despensas que se pretenden entregar en Nuevo León y Oaxaca durante la jornada electoral, en lugar de distribuirlas sólo entre los damnificados del huracán Álex.

Por eso, retomó Camacho, Dia se concentrará en los estados donde habrá elecciones para responder a las agresiones con la cabeza y la ley a fin de llegar al domingo a una elección con alta participación.

El coordinador de Dia también puntualizó la importancia de que la primera reunión entre las fuerzas políticas del país se efectúe antes del proceso electoral del domingo porque la próxima semana podemos estar en un clima de mayor encono por los resultados de los comicios, lo que dificultaría el diálogo.

Los partidos y el Poder Ejecutivo incurrirían en una responsabilidad enorme como ciudadanos si a pesar de tener la opor- tunidad de unir nuestras fuerzas contra la delincuencia, caemos en la tentación de debilitar más aún las instituciones democráticas, con lo cual la delincuencia tendría mayores posibilidades de crecer, igual que la violencia. Cuando se va en la dirección correcta no se hace un cálculo, subrayó Camacho Solís.

Antes, en la lectura del posicionamiento de Dia, el perredista Jesún Ortega mencionó que entre las propuestas que llevarán al diálogo nacional está la de convenir las acciones que impidan la vinculación de la política con las organizaciones criminales. Para ello la ley se debe aplicar de manera general y sin regateos de ninguna especie.

PRD, PT y Convergencia también solicitarán a Felipe Calderón la eliminación de la orden de aprehensión en contra de América del Valle, así como el reinicio de las negociaciones con los sindicatos de electricistas y minero. Se trata, plantearon, de cerrar por completo el recurso de la criminalización de la lucha social y de la utilización del combate al narcotráfico con fines electorales.