Deportes
Ver día anteriorMartes 25 de mayo de 2010Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

A veces se nos olvida que no somos una potencia, no nos situamos en la realidad, comenta

En el futbol mexicano hay una vocación de sufrimiento, afirma Miguel España

Las especulaciones en torno al Tri hacen que las expectativas se vuelvan demasiado altas, dice

 
Periódico La Jornada
Martes 25 de mayo de 2010, p. a14

En el futbol mexicano hay una vocación de sufrimiento. Sobre todo porque a veces se olvida que no somos potencia en la materia, explica Miguel España, integrante de la selección que participó en el Mundial de México 1986 y para quien las especulaciones en torno al Tricolor hacen que las expectativas se vuelvan demasiado altas.

El problema, expone, es que no estamos acostumbrados a situarnos en la realidad, a ubicar el lugar que ocupa nuestra liga en el mundo, cuántos jugadores tenemos en Europa como titulares y en los grandes equipos.

No es fácil, dice, hacer este ejercicio crítico y recuerda el escándalo que provocaron las declaraciones de Javier Aguirre a una cadena de radio española. Aquellas palabras causaron escozor, porque pusieron el dedo en la llaga, comentó durante la inauguración de la muestra fotográfica México mundialista, en las rejas de Chapultepec.

Aún así, España considera que la generación que actualmente integra el Tricolor ha evolucionado. De hecho, aclara que en el balompié nacional no sólo existen momentos amargos, como ponen de relieve varias fotografías expuestas en Chapultepec. Existen también momentos gloriosos, recuerda, y pone como ejemplo la victoria en la final de la Copa Confederaciones, cuando la selección le ganó a Brasil en el estadio Azteca.

En el deporte nunca se puede descartar la posibilidad de llegar lejos. Lo vimos en Perú, con la selección mexicana Sub-17, campeona mundial. De repente surge un equipo así, casi por generación espontánea y da resultados, añade.

La actual escuadra, para el ex mediocampista de Pumas, tiene elementos que la hacen inspirar entusiasmo. Porque se ve bien, se nota equilibrada y tiene varios jugadores que militan en Europa.

No obstante, España advierte que todavía le falta demostrar de qué está hecha, y eso quedará claro al concluir la gira europea de preparación.

Lo dice con seguridad, porque afirma que el plantel del que formó parte en 1986 es el más sobresaliente en mundiales. Lo digo con datos y estadísticas: la nuestra ha sido la mejor selección.