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Balance de la Jornada

América, de panzazo; Monterrey, por el bicampeonato y Cruz Azul, el fracaso

E

l América recibió una manita de la FMF, órgano que, contra su costumbre, no programó a la misma hora todos los partidos de la fecha 17 de los equipos que peleaban la clasificación, y llegó a la cita frente a Santos con la motivación en alto, sabiendo que tenía el destino en sus manos. Un indolente Cruz Azul quedó eliminado; murió de apatía, congestionado de tantos subcampeonatos.

Las series de cuartos de final arrancarán con los duelos Pachuca-Monterrey, Morelia-Chivas, América-Toluca y Santos-Pumas.

Las Águilas, Monarcas y Tuzos son la prueba palpable de la mediocridad de la liga mexicana, pues los tres equipos tuvieron una efectividad por debajo de 50 por ciento, pero más de uno salvó la chamba con la conquista del sufrido boleto y ahora rebota hacia los cuatro puntos cardinales la frase acuñada de que la liguilla es otro torneo, donde todos parten de cero.

Mentira, Monterrey fue el equipo más consistente y es firme candidato al bicampeonato. El cuadro regio, pese a tener un amplio y competitivo plantel, tramitó su pronta eliminación de la Copa Libertadores, y el Rey Midas, Víctor Manuel Vucetich, afila los colmillos. Por lo pronto, este sábado dio una lección de táctica al Morelia de Tomás Boy.

De los tres primeros lugares Chivas se muestra como el cuadro más débil. Tras el saqueo que sufrió en aras de apoyar a la selección nacional, este martes, junto con San Luis, comenzará a disputar la fase de octavos de final de la Copa Libertadores, lo que implica un nuevo desgaste y lo más seguro es que la mezquindad de su directiva no alcance para allegarle grandes refuerzos.

Nunca se puede descartar al Diablo. Toluca, entre los máximos ganadores en torneos cortos, tuvo un gran cierre de campaña y es experto en liguillas. Llega a esta fase con mejor futbol que en otras ocasiones. Sólo es cosa de que Héctor Mancilla y compañía afinen la puntería para que las aspiraciones sean sólidas, a pesar de los rumores sobre la salida del entrenador José Manuel de la Torre.

Pumas es el espejo de Ricardo Ferretti, equipo que ha priorizado la defensa y se enorgullece de haber sido el menos goleado, lo cual es una buena apuesta cuando se tiene al frente a delanteros como Dante López, quien se ofende por los abucheos, pero anota goles a cuentagotas y vive del pasado, de aquel par de anotaciones en la conquista del título frente a los Tuzos.

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Navarrete suplió con creces a Memo Ochoa en el arco de las ÁguilasFoto Ap

América debe motivarse revisando hasta la saciedad el video de aquella goliza de 7-2 que asestó a los choriceros, en agosto de 2009. La mala noticia es que ya no está Salvador Cabañas, autor de dos tantos en esa ocasión, ni tampoco el portero Hernán Cristante, quien vivió una de sus peores tardes. Pero en el nido hoy están ciertos de que los milagros existen y van por uno más.

Santos Laguna llegó a trompicones. En la fecha 14 cayó ante la UNAM y sin embargo ahora se espera más del tridente Vuoso-Ludueña-Quintero. Morelia empezó bien y terminó dando bandazos. El veterano Jared Borgetti y Luis Gabriel Rey deberán sacar juventud de su pasado para avanzar.

Los Tuzos llegaron sin hacer ruido y se pueden ir de la misma forma. Se juegan el todo o nada; van ante los Rayados y quieren arrebatar a La Máquina el boleto al Mundial de Clubes.

El Chicharito Hernández, refuerzo del Manchester United, fue la figura del certamen y a pesar de haber abandonado su cuenta de goles desde la fecha 13, cuando acudió al llamado del Tricolor, es junto con el estadunidense Hérculez Gómez y el peruano Johan Fano campeón de goleo. Hubo agradables revelaciones, como el rojinegro Hébert Alférez y el rojiblanco Michel Vázquez.

El indiscutible fracaso del torneo fue un Cruz Azul que se había reforzado para, ahora sí, ir por el título. Trajo al Chaco Giménez que hace buen vestidor, pero que comenzó a rendir tarde y sin convencer demasiado; al tristemente célebre por el gol en meta propia, Edcarlos Conciençiao, y al primo de Messi, Maximiliano Biancucchi. Ahora todos buscarán su expiación con el título de la Concachampions.

El Tri cumplió su fase de trabajo físico en el búnker de Avándaro, pero las lesiones siguen afectando al equipo. La más preocupante es la de Andrés Guardado, cuya incorporación al equipo es cuestión de horas, mientras se espera que en unos días el Chicharito reciba el alta médica.