Madrid, 15 de marzo. Eloy Velasco, juez de la Audiencia Nacional de España, giró órdenes internacionales de captura contra seis ciudadanos vascos residentes en Venezuela, a quienes vincula con la organización armada ETA, y contra cinco ciudadanos colombianos, presuntos miembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).

Este es el primer paso de un eventual proceso de extradición contra los imputados a los que el magistrado acusa de intento de asesinato en territorio español contra el presidente colombiano, Álvaro Uribe, y su antecesor Andrés Pastrana, entre otros altos funcionarios.

Tras la crisis diplomática que desató su resolución –en la que acusó al gobierno de Venezuela de colaborar con ETA y las FARC– Velasco dio un paso más para iniciar la extradición de las 11 personas vinculadas al caso.

El juez considera que los seis ciudadanos vascos y los cinco colombianos habrían compartido información sobre el uso y manejo de explosivos, e incluso habla de algunos cursos con el objetivo de atentar en territorio español contra Uribe.

Las órdenes fueron giradas contra los ciudadanos vascos José Ignacio Echarte, Ignacio Domínguez Achalandabaso, José Miguel Arrugaeta San Emeterio, José Ángel Urtiaga Martínez, José Antonio Zaldúa Corta y Arturo Cubillas Fontán, este último señalado como el supuesto enlace de ETA y las FARC con el gobierno de Hugo Chávez.

Los presuntos miembros de las FARC son Rodrigo Granda Escobar, Luciano Martín Arango, Omar Arturo Zabala, Víctor Ramón Vargas y Édgar Gustavo Navarro. Tanto ellos como los seis supuestos etarras están acusados de colaborar con organización terrorista.

Velasco emitió una resolución en la que acusa al gobierno de Venezuela de colaborar con ETA y las FARC, con base en la información supuestamente encontrada en la computadora de Raúl Reyes, número dos de las FARC asesinado por el gobierno colombiano, cuya veracidad ha sido cuestionada.

Las órdenes de detención internacional ahora tendrán que esperar a ser trasladadas al Ministerio del Interior para posteriormente ser cursadas a la Interpol, que será el grupo policial que deberá ingresarlas en su base de datos, para así iniciar un largo proceso legal.

Desde Caracas, Chávez reiteró que es estúpido acusar a Venezuela de tener nexos con ambos grupos armados y agregó que ya no tenía nada qué responder. Añadió, no obstante, que gracias a un acuerdo entre el ex presidente de su país Carlos Andrés Pérez con su entonces par español, Felipe González, llegó aquí un grupo de gente que perteneció a ETA.