Viernes 5 de marzo de 2010, p. 37
La Arquidiócesis de México minimizó el comienzo del registro de peticiones para bodas de personas del mismo sexo y dijo que si bien estas uniones podrán “ser legales, seguirán siendo inmorales”. Remarcó que los beneficiarios de esta ley son una “minoría prácticamente insignificante”, por lo que no habrá tanta demanda de enlaces y auguró que de lo que habrá mucha demanda en un tiempo más, será de divorcios, pues estas parejas “no son estables”.
Hugo Valdemar Romero, vocero de la Arquidiócesis señaló que no se ha respetado el derecho de los niños a tener una familia “normal”, a lo que se suma la posible disolución del enlace en corto tiempo por la “inestabilidad” de estas parejas. “Insistimos, esta ley no vela por el bien de los niños y eso es preocupante.”
Sostuvo que estos enlaces “ensombrecen y minan la concepción de familia y van diluyendo los valores fundamentales, pervirtiendo la mentalidad de las nuevas generaciones”, pero agradeció a Dios que aún en México lo que prevalece son “las familias normales”.