A pesar del momento crítico de la economía y de la política social, en la Secretaría de Desarrollo Social (Sedeso) se colocó a un funcionario, Heriberto Félix Guerra, que en su currículo no cuenta con capacidades en temas tan delicados y tan relacionados con el nivel de vida de la población.

El Observatorio de la Política Social y Derechos Humanos señaló lo anterior y precisó que la Sedeso juega un papel decisivo en la política social mexicana, ya que desde ahí se diseñan, gestionan e instrumentan los programas más grandes encaminados a proteger y mejorar el nivel de vida de la población mexicana.

Señaló que el titular, además de ser íntegro y socialmente responsable, debe contar con una trayectoria burocrática importante y con una formación académica que le permita enfrentar con éxito el reto del desarrollo social en México.

Félix Guerra en la Secretaría de Economía fue encargado de los proyectos de las pequeñas y medianas empresas (pymes). Más allá de valorar su capacidad como funcionario a la luz del éxito o fracaso de las PyMES, hay que destacar que es distinto manejar microcréditos a dar protecciones y seguridades a la población mexicana. Sin duda, Félix Guerra recibe a la Sedeso en un momento crítico, el que convive la crisis económica con programas sociales deficientes en su diseño, operación y resultados.

Consideró que la alta burocracia es un juego donde intervienen tres cosas: capacidades, currículos y vínculos políticos. No hay evidencia que muestre que el nuevo nombramiento atiende a la segunda. Hay puestos, niveles e instituciones donde es inadmisible improvisar.