Opinión
Ver día anteriorDomingo 15 de noviembre de 2009Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
 
Entredichos entre dichos
M

ientras para mí la misión de una gallina es poner el huevo y empollarlo, para ti no basta que la gallina ponga el huevo, sino que debe cacarearlo. ¿Cacarear? Exagerar lo que uno hace. ¡Cómo cacarea lo poco que hace! Cacareador, exagerado. Principios opuestos, el tuyo y el mío. El que aprende a cuidarse las uñas para no arañar, versus el que se las deja crecer. Cacarear, arañar. En sentido familiar y figurado, arañar es lo mismo que robar. ¿Y empollar? Calentar el ave los huevos. Meditar profundamente en cualquier asunto. Estudiar con ahínco. Arañar, recoger con mucho afán. Ahínco, empeño grande. Afán, trabajo excesivo y penoso o deseo desmedido.

Lo que no puedo consultar es el diccionario que en estos momentos tengo a mano de dichos y frases hechas, porque está en desorden aunque cada inclusión lleve un número y la numeración esté seriada. El número 1, es Ser una bicoca; el 2, Temblar como un azogado; el 3, Brillar por su ausencia hasta, en este desorden, llegar al número 711, que es Subirse a las barbas de alguien. ¿Leer 711 entradas con la esperanza de encontrar de casualidad qué significa No basta poner el huevo, hay que cacarearlo? Mejor recuerdo a las gallinas que he visto en los gallineros empollando sus huevos, cacareándolos, o anunciándolos, o no. Las he visto caminando y cacareando, sin empollar nada. Porque, efectivamente, las gallinas cacarean. Y empollan. Y ponen huevos. Nunca he visto, sin embargo, el nacimiento de un pollo, el momento en que el pollo rompe el cascarón.

A huevo, número 14: Hubo un tiempo en que los huevos tenían un precio tan bajo, valían tan poco, que así como de lo muy valioso se decía que estaba a precio de oro, de lo que costaba poco o muy poco se sostenía que estaba a (precio de) huevo. El 39 dice: Otro gallo le cantara, que, según la mayoría de los comentaristas, se cree que procede del relato del Nuevo Testamento en el que Jesucristo le anticipa al apóstol Pedro que antes de que el gallo cante dos veces, él lo habrá negado tres. Si San Pedro no negara/ a Cristo como negó/ otro gallo le cantara/ mejor que el que le cantó. La suerte de alguien sería otra muy distinta y mucho mejor. O: Si hubiera cacareado (su huevo), otro gallo le cantaría. Ah.

Sin necesidad de comparar el nacimiento de un pollo con el histórico ejemplo de Colón (ni siquiera aunque se le dispute a él la primicia), se puede hablar del huevo de Colón (66) y entender que Las grandes dificultades hasta saberse lo son/ que sabido, todo es fácil, pero en México el pudor me impide añadir que los gallos, que no son quienes ponen los huevos (aunque los pongan), también cacarean, que es lo mismo que cantar. Y cantar, que denunciar. Ponérsele a uno carne de gallina (332): Aspecto que toma la epidermis, similar a la piel de las gallinas desplumadas, debido al frío o al miedo. Si la desplumas, yo diría, empóllala. ¿No?

Lo anterior, para llegar al dicho que me puso la carne de gallina hace un par de semanas en Morelia, Michoacán, a donde ya llegué un poco sobre aviso. A no sé quiénes los habían asaltado en la carretera y la moreliana que nos recibió a mi esposo y a mí nos confirmó que la violencia también estallaba en la ciudad, pero que se concentraba en los contendientes, El Narco y el Estado, y que no alcanzaba a los civiles, que por otra parte ya estaban acostumbrados. Yo miraba sobre el hombro mientras nos paseaba y nos refería la excepción, el caso del único civil caído a la fecha. Sucedió en un autobús de línea, atestado, cuando una joven pasajera cedió su asiento a un anciano al que, en cuanto se sentó, lo alcanzó una bala perdida que lo mató al instante. Apenas si había agradecido el gesto y su suerte. Pensé en la idea del fatalismo, cuando la edecán dijo la frase que me enchinó la piel. Si te toca, ni aunque te quites,/ si no te toca, ni aunque te pongas.

La anécdota lo confirmaba. No obstante, es un principio que al mismo tiempo que inquieta, tranquiliza, ¿no? Como el concepto de predestinación. ¿Puedes contra él? Pero, con pluma o desplumada, tampoco vas a cruzarte de brazos. Entonces, ¿vas a propiciar el destino? ¡No! Ni una cosa ni la otra. Porque el huevo lo vas a poner. Sí. Y empollar. También. ¿Y cacarearlo? No sé. Tendría que dejarme crecer las uñas, cambiar de principios. Estaría mejor que creer que puedes desviar la bala, ¿no?