En los recientes tres años, la administración capitalina ha otorgado reducciones y subsidios fiscales por 40 millones de pesos, menos de uno por ciento de los 5 mil millones captados en el desarrollo de la industria de software, nuevas tecnologías e inmobiliarios, con lo cual ha generado y preservado 22 mil 189 empleos, informó la secretaria de Desarrollo Económico (Sedeco), Laura Velázquez Alzúa.

En su tercer informe de labores, que presentará este miércoles ante la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, señala que la capital, al igual que las demás entidades del país, ha sido muy golpeada por la crisis, pero a diferencia de ellas se mantiene como la principal captadora de inversión extranjera directa, con 55 por ciento de la que llega al país, aunque en el segundo trimestre del año, en plena contingencia sanitaria, alcanzó hasta 74.2 por ciento.

Además de aportar 21 por ciento del producto interno bruto nacional, el DF está a la cabeza en generación de empleos formales, con 18 por ciento, más del doble que estados como Jalisco, México y Nuevo León, como resultado de los beneficios fiscales y devolución de impuestos otorgados al sector privado, con lo que se ha logrado mantener la planta productiva, que hoy asciende a 342 mil 500 plazas, dijo.

La funcionaria destacó que como parte de la política de protección a la economía familiar y al empleo, vigente hasta finales de año, se han devuelto, al 30 de septiembre más de 100 millones de pesos del impuesto sobre nómina (ISN) a 5 mil 407 empresarios, se asesoró y capacitó gratuitamente a empresas, y se otorgaron créditos al autoempleo, apoyo a las micro y pequeñas empresas, y el financiamiento para la comercialización de productos rurales, por 73.3 millones de pesos.

Las medidas adoptadas, a diferencia de otras administraciones, se toman en conjunto con el sector productivo, que participa en las mesas anticrisis y, paralelamente, se conformó el Consejo Asesor Económico de la Ciudad de México, integrado por premios Nobel de economía, sector público y privado, e instituciones académicas, con el objetivo de formular propuestas viables que contribuyan a mejorar el desarrollo económico de la capital, señaló.

El Distrito Federal tiene un papel preponderante para la economía del país, por lo cual resulta de elemental justicia la exigencia de un trato fiscal equitativo, particularmente en lo que se refiere a aportaciones federales, afirmó.