Las reuniones con autoridades cubanas que mantuvo una alta funcionaria estadunidense en La Habana no cambia nada en cuanto a las relaciones con la isla, aunque son consistentes con la política de acercamiento promovida por la Casa Blanca, afirmó ayer el Departamento de Estado.

No diría que cambie nada en lo que se refiere a nuestra relación con Cuba pero, obviamente, son consistentes con los esfuerzos del presidente (Barack Obama) para aumentar el libre flujo de información y la interacción entre Estados Unidos y el pueblo cubano, dijo el vocero adjunto Philip Crowley en su rueda de prensa diaria.

El martes trascendió que la secretaria de Estado adjunta para Asuntos Hemisféricos, Bisa Williams, aprovechó la visita que realizó a La Habana a mediados de mes con el objetivo de discutir la reanudación del correo directo entre Estados Unidos y Cuba, interrumpido desde 1963, para mantener también reuniones con altas autoridades cubanas, entre ellas el canciller Bruno Rodríguez.