Grenoble, Francia, 30 de septiembre. La presión se acentuó el miércoles sobre el presidente de France Telecom, Didier Lombard, quien deberá explicar el jueves ante la ministra francesa de Economía, Christine Lagarde, sobre su plan tras los 24 suicidios de empleados de la empresa en un poco más de un año. Otro empleado del operador telefónico francés se tiró el lunes por la mañana desde un viaducto que da a una autopista. Este nuevo suicidio he vuelto a poner el punto de mira en los métodos de gestión del gigante de las telecomunicaciones para adaptar al ex monopolio público, todavía integrado por 65 por ciento de funcionarios, al nuevo y más competitivo mundo de la telefonía y de Internet. Lagarde explicó el miércoles en la televisora France 2 que iba a recibir el jueves por la mañana a Lombard para pedirle explicaciones sobre el plan que aplicará después de esta ola de suicidios. Al periodista que le preguntó si quería la dimisión de Lombard, como pidió la izquierda, Lagarde respondió que quería saber si habrá la determinación y la fuerza para hacer lo que hay que hacer a fin de calmar lo que pasa y la violencia de lo que pasa. Por otra parte, los sindicatos de France Telecom dijeron haber salido decepcionados el miércoles por la noche de una reunión con la dirección del grupo para discutir sobre el malestar en el trabajo.