Deportes
Ver día anteriorMartes 25 de agosto de 2009Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

La Conade no entregó el material deportivo a tiempo en Berlín

Éder Sánchez compró los tenis con los que ganó la medalla de bronce
 
Periódico La Jornada
Martes 25 de agosto de 2009, p. a15

Víctor Sánchez recordó con humor que su hijo Éder tuvo que comprar en Berlín los tenis de 2 mil pesos con los que ganó la medalla de bronce en el Mundial de Atletismo, porque jamás recibió el par que envió la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), la cual durante un año invirtió entre 800 mil y un millón de pesos en su preparación.

El padre y entrenador de Éder comentó la promesa que hizo el metodólogo de la Conade, Moisés López, de que les haría llegar el material deportivo a tiempo, pues durante la preparación del marchista, quien estuvo casi tres meses en Europa, el andarín se acabó siete pares y poco antes de llegar a Berlín se quejaba de dolencias en los tobillos, porque requería de unos nuevos.

Tres días antes de la competencia recibieron la mala noticia. El enviado de López (un empleado de la Conade de origen español) sí llegó, pero se le olvidó comprar los tenis.

El mexiquense tuvo que comprar los zapatos especiales (en Adidas), y 24 horas antes de su prueba (15 de agosto) caminó todo el día con ellos para que se amoldaran.

Yo sí me preocupé, porque eso no se puede hacer en ninguna competencia. Es un gran riesgo usar tenis nuevos, pero mi hijo se la jugó, rememoró ayer Víctor Sánchez, después del entrenamiento en el Centro Deportivo Olímpico Mexicano, rumbo al compromiso en Rusia, el próximo mes.

Espera que esta amarga experiencia no vuelva a repetirse, señaló Víctor, porque afortunadamente cumplieron con el objetivo de subir al podio en la prueba de 20 kilómetros, con 1:19.22 horas, en la que Éder mejoró por 14 segundos su marca de la temporada, a pesar de las adversidades que se dieron en el camino, ya que hubo gente que no creía en ellos, tras lo sucedido hace un año en Pekín.

Víctor, quien en su época fue marchista y proviene de una dinastía en la que figura su hermano, el medallista olímpico Joel Sánchez, consideró que el potencial de su hijo todavía no se ha explotado al máximo, y menos en una prueba en la que los metales se ganan por escaso margen, ya que desde 2005 había 20 andarines que caminaban la distancia sobre 1:20.

En cuatro años, rusos y chinos, además de Éder, bajaron sus cronos o se mantuvieron con 1:18 y 1:19, y las expectativas hacían pensar que mi hijo estaría en el podio.

En esta ocasión ambos trabajaron en la estrategia que Éder aprendió del ecuatoriano Jefferson (Pérez) y el español Paquillo (Fernández): no desgastarse en los primeros kilómetros, mantenerse en el grupo puntero y atacar hasta el final, relató el entrenador, quien espera compatir otro sueño con su hijo en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, y para eso el apoyo económico es fundamental en los campamentos y competencias.

Mientras Éder es cabo de transmisiones y su padre, sargento primero en la Secretaría de la Defensa Nacional, los compromisos sociales y políticos apenas comienzan, ya que ambos estarán el próximo viernes con el gobernador del estado de México, Enrique Peña Nieto.