Opinión
Ver día anteriorLunes 24 de agosto de 2009Ver día siguienteEdiciones anteriores
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Balance de la Jornada

Pumas, de lo sublime a lo ridículo

Cruz Azul y Chivas, grandes en desgracia

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El paraguayo Darío Verón está lejos del nivel mostrado en el torneo anteriorFoto Reuters
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s muy difícil comprender la forma en que Pumas transformó todas sus virtudes en defectos y de la noche a la mañana –tan sólo en cinco juegos– pasó de ser un equipo compacto al peor campeón en la historia del futbol mexicano.

En una semana la directiva universitaria tuvo que ratificar dos veces al técnico Ricardo Ferretti para tratar de calmar una situación que en otro club, o con los mismos auriazules pero sin tratarse del Tuca, ya habría provocado cambios. Para los aficionados resulta inexplicable que un conjunto que se coronó con gran nivel ante un rival difícil como Pachuca haya sido goleado 3-0 por unos grises Estudiantes y sufrido su quinta caída al hilo en este inicio de torneo.

El sótano general, 12 goles en contra y apenas uno en favor representan el saldo de un plantel que perdió la unión no sólo en la cancha sino quizá también en el vestidor. La nota buena para el cuadro universitario es que podrá resurgir a partir de este domingo ante un Querétaro que muy temprano emprendió el camino de regreso a la liga de ascenso.

Tal vez se agotó la fórmula del gritón Ferretti, como en su tiempo la táctica motivacional de Hugo Sánchez, pero lo que deberá mantenerse en el conjunto de la UNAM es el apoyo a su cantera, la continuidad en el primer equipo y la elección de refuerzos no tan caros pero que marquen diferencia.

Otros grandes en desgracia son Chivas y Cruz Azul. Guadalajara perdió el futbol vistoso que lo caracterizaba y sigue sin ganar en el torneo. Omar Bravo es una incógnita y, por lo mostrado, tardará un tiempo en recuperar su nivel. El timonel Francisco Ramírez criticó la apatía de sus jugadores, escudado en un apoyo hasta ahora incondicional de la pareja presidencial rojiblanca, antes tan proclive a los despidos fulminantes.

Los Cementeros se siguen espantando con los mismos fantasmas. Extraña paternidad que les tiene el América –seis años y 15 partidos sin derrota aunque se trate del extinto Socio Águila o, en este caso, del novel Daniel Márquez– y parecen cobrar validez las palabras de Miguel Sabah, a quien no lo corrieron por malo, sino por decir la verdad.

América no ganaba tres partidos al hilo desde hace dos años y esos 12 puntos lo hicieron escalar no sólo en la tabla general, sino en la de cocientes. Poco a poco, sin convencer mucho, empieza a olvidarse del descenso, pero el próximo domingo en el Azteca tendrá en Toluca un parámetro que marcará su real recuperación.

Es de destacar que en la tabla de goleadores figuren, como hace mucho tiempo no lo hacían, varios elementos del país. Néstor Calderón, Javier Hernández y un Sabah sin miedo destacan entre tanto extranjero.

La jornada cinco quedará marcada por el uso del espray para poner a raya las barreras en los tiros libres. La medida parece buena en pro del juego limpio, pero los rapaces directivos mexicanos de inmediato comercializaron el asunto. Aunque podría esperarse de un balompié donde hay publicidad hasta en el trasero de los jugadores.