Mientras la crisis financiera golpea al mundo del futbol, sobre todo a Latinoamérica, donde disminuyeron numéricamente los fichajes, bajaron los montos de operaciones y peligra el comienzo de la liga argentina por falta de pagos, México arranca el torneo Apertura 2009 como una isla que parece no haber recibido embate alguno.

El mercado de traspasos se inició con un draft austero: transferencias por 271 millones de pesos (21 millones de dólares), 10 por ciento menos que el año pasado, y tan sólo 23 operaciones de compra-venta, por 42 préstamos, según datos de la Federación Mexicana de Futbol (FMF).

Excepto por el paso del portero José de Jesús Corona, de Estudiantes a Cruz Azul, por más de tres millones de dólares, los jugadores nacionales tasaron menos que en 2008, explicó Enrique Bonilla, director general deportivo de la FMF.

Sin embargo, después empezaron las grandes operaciones. Otra vez refuerzos extranjeros y cifras de seis ceros. En Latinoamérica las cosas están difíciles para fichar y el único que tiene dinero para hacerlo es el América mexicano. Los demás están todos en la misma situación, comentó días atrás el técnico de Boca Juniors, de Argentina, Alfio Basile.

De hecho, las Águilas registraron el fichaje más costoso con el regreso del colombiano Aquivaldo Mosquera, por unos 5.9 millones de dólares.

El América abrió la cartera

El cuadro de Coapa, que encabeza la lista de los últimos cinco en la tabla porcentual con peligro de descenso, sacó otra vez la cartera para gastar cerca de 15 millones de dólares en seis futbolistas, tres de ellos fóraneos.

El equipo ya tiene que demostrar que está bien armado, bien planificado y bien dirigido, expresó recientemente su director deportivo, Jaime Ordiales.

Volver a la liguilla tras cuatro torneos de ausencia desvela también al América, que tendrá a siete no nacidos en México en su alineación. Eso frena el crecimiento de su cantera, no es lo ideal, no es lo que quiere el club. Es una necesidad que se presentó y son excepciones, admitió Ordiales y prometió incluir a sus fuerzas básicas a mediano plazo.

Otro grande en apuros y con millonaria inversión es Cruz Azul, con un estimado de 13 millones de dólares entre Corona, el hondureño Ramón Núñez, el argentino Emanuel Villa, Melvin Brown, Horacio Cervantes y posiblemente el chileno Emilio Hernández.

Además, nuevo técnico (Enrique Meza), director deportivo (Alberto Quintano) y fastuosa presentación de la playera para rencaminar a La Máquina, que en el torneo anterior cayó al último lugar de la tabla y sigue distanciada de su afición.

Para luchar por la permanencia, Tigres también apeló al dinero: llegaron el brasileño Itamar Batista, los argentinos Gastón La Gata Fernández y Fernando Ortiz, Édgar Castillo, Alfredo González Tahuilán, David Toledo y el técnico Daniel Guzmán.

La renovación de camisetas, estrategia europea de mercadotecnia, parece que llegó para quedarse. Aún sin cambios de patrocinadores o contratos, Chivas, América, Cruz Azul, Pumas, Puebla, Atlas y Estudiantes estrenarán uniformes que cuestan cerca de mil pesos cada uno.

Un oasis

La liga mexicana sigue siendo una opción atractiva para los clubes sudamericanos, que exportan a sus jugadores a precios similares a los que venden a Europa y, otra vez, futbolistas argentinos huyeron de sus equipos con más ansias de aterrizar aquí que temor a los problemas legales.

Como temporadas atrás lo hicieron Daniel Ríos, al Veracruz, Neri Cardozo, a Jaguares, y Martín Bravo a Pumas, ahora Diego Novaretti llegó al Toluca en lo que su ex club, Belgrano de Córdoba, tildó de fuga y adelantó que pedirá su inhabilitación a la FIFA.

Cuando las cosas se complican en el viejo continente o sus países natales, los jugadores también optan por volver al cobijo del balompié tricolor. Siete regresos hay en esta temporada: Emanuel Villa (Derby County), Aquivaldo Mosquera (Sevilla), La Gata Fernández (Estudiantes de La Plata), Mauro Cejas (San Martín), Rubens Sambueza (River Plate), el camerunés Alain Nkong y el colombiano Aldo Leao Ramírez.

Tan sólo hubo dos salidas destacadas: la del ecuatoriano Christian Benítez, al Birmingham de la Liga Premier (12 millones de dólares), y la del argentino Federico Pocho Insúa, a préstamo en Boca Juniors.

Además de destacar por su blindaje ante la crisis, México es hoy vitrina y lo prueban las frecuentes convocatorias de las selecciones sudamericanas a los jugadores que aquí militan y la llegada al Atlante del internacional Santiago Solari, ex del Real Madrid, Inter de Milán, Atlético de Madrid y San Lorenzo.

El Indiecito –aunque ya no quiere que lo llamen así– es dueño de su carta y se sumó a los Potros sin más condición que un sueldo mensual. Explicó que se dejó seducir por el paquete de logros futbolísticos del conjunto azulgrana, sus próximas participaciones internacionales (Copa de la Paz y Mundial de Clubes) y residencia en el paradisiaco Caribe.

Es el fichaje más importante en dos décadas, celebró el directivo José Antonio García, con la vista en la internacionalización del cuadro atlantista.

Sin cambios y a fuerza de cantera, Pumas irá por el bicampeonato y tendrá doble competencia, con presencia en la Copa de Campeones de Concacaf, al igual que Cruz Azul, Pachuca y Toluca. También Chivas mantendrá a su plantel anterior y Toluca buscará sobrellevar la ausencia de su ex capitán, Paulo da Silva.

El ascendido Querétaro, pero también Tigres, Atlas, Puebla y América se encuentran en zona de peligro.

En su tercer torneo en primera división, Indios tratará de afianzarse y el nuevo Estudiantes, ex Tecos, irá por el segundo título de su historia.

Pachuca buscará revancha después de caer en la anterior final e iniciará una nueva era con Guillermo Rivarola en el banquillo, tras años de éxitos con el Ojitos Meza.

El Apertura 2009 se inicia este viernes con el juego Estudiantes-Pachuca, a las 20 horas en el estadio Tres de Marzo, y concluye en fase regular el domingo 14 de noviembre, para dar paso a la liguilla, hasta la primera semana de diciembre.