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Tengo mucho respeto a Costa Rica, pero no miedo, advirtió el entrenador sueco

El Tri, por su primer triunfo en el hexagonal y salvar a Eriksson

Si pierde hoy y el miércoles, mi futuro no existe, expresó el técnico

Pardo será el capitán

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Práctica de ayer en el Centro de Alto RendimientoFoto Ap
 
Periódico La Jornada
Sábado 28 de marzo de 2009, p. a12

En la selección mexicana de ninguna manera minimizan al representativo tico ni a otros adversarios, aclaró Sven-Goran Eriksson. Tengo mucho respeto a Costa Rica, miedo no, dijo rumbo al partido que puede definir la suerte del entrenador de 61 años, este sábado en el estadio Azteca, en el hexagonal rumbo al Mundial de Sudáfrica 2010.

El timonel sueco dijo que el duelo de hoy será muy difícil, pero consideró fantástico jugar ante 100 mil personas, y espera que a las 19 horas los seguidores del Tricolor estén muy contentos.

Para este segundo duelo del hexagonal, aseguró no tener ninguna duda en la alineación. Resaltó que somos muy afortunados al tener tres grandes porteros; sin embargo, no reveló si será Oswaldo Sánchez o Guillermo Ochoa quien esté en el arco. Lo único que reveló es que jugará con dos delanteros y que Nery Castillo no estará de inicio, porque no cuenta con el ritmo para aguantar los 90 minutos.

Sobre quién será el capitán ante la ausencia de Rafael Márquez, tampoco tuvo que pensarlo mucho: será Pável Pardo. Eriksson aseguró que dentro del equipo hay varios líderes, pero Pardo sobresale y no sólo aquí. Recordó que en Alemania también tuvo esa distinción, donde no era fácil que se la den a un jugador extranjero.

Por lo que respecta a los ticos, comentó que es un equipo muy organizado y que deben tener mucha atención, porque en pelota parada son muy fuertes, aunque lo más importante es el comportamiento de nosotros; perdimos el primer juego (de la eliminatoria) y tenemos que ganar.

Costa Rica arriba con el aliciente de haber vencido 2-0 a Honduras, suma tres unidades, por lo que es colíder del hexagonal, empatado con Estados Unidos. En contraste, el equipo mexicano llega tras una derrota de 2-0 ante el cuadro de las barras y las estrellas, por lo que está en el fondo del sector, sin unidades.

Interrogado sobre si algunas reacciones como la de Castillo (quien el miércoles pasado tuvo un enfrentamiento con los medios de comunicación) es por la presión de más que hay en el equipo, respondió que el grupo trabajó muy bien en la semana y no tenemos problemas cuando estamos en la cancha. Estimó que la presión es enorme al ser seleccionado, más en un país como México, pero por eso quieren tanto este trabajo.

El Tri tendrá ausencias sensibles en su esquema, como el suspendido Rafael Márquez (del Barcelona) y los lesionados Carlos Salcido (PSV, Holanda) y Giovani dos Santos (Ipswich, Inglaterra).

Después del duelo de hoy, México visitará el miércoles primero de abril a Honduras, mientras Costa Rica recibirá a El Salvador.

En relación con el incidente que protagonizó Castillo, Eriksson señaló que no tenía mucho que comentar al respecto. Indicó que tal vez Nery debió dar su opinión de una forma más elegante, aunque no es el fin del mundo tampoco. Piensa que en un mes va a causar risa todo esto.

En la conferencia de prensa de ayer en el Centro de Alto Rendimiento de la Federación Mexicana de Futbol estuvieron presentes reporteros suecos, quienes cuestionaron a Eriksson sobre cuál será su futuro en caso de perder hoy ante Costa Rica y el miércoles con Honduras, y les contestó: Muy simple: no existe.

El hexagonal dará tres boletos directos al Mundial 2010. El cuarto clasificado jugará una serie de dos partidos con el quinto lugar de la eliminatoria sudamericana para definir otro pase.

Operativo especial

En tanto, la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal alistó un operativo con más de mil policías, quienes serán apoyados con 263 vehículos, para resguardar la integridad física y patrimonial de los asistentes al partido. Los aficionados de ambos equipos serán resguardados dentro del estadio por 600 elementos de la Policía Auxiliar y 513 de seguridad privada.