■ Especialistas: no ha logrado fomentar una cultura al respecto
Graves fallas del Cenatra en cuanto a donación y trasplante de órganos
El problema de fondo con la donación y trasplante de órganos en México es la falta de control y capacidad de vigilancia del Centro Nacional de Trasplantes (Cenatra), ente rector en la materia, el cual tampoco ha logrado impulsar realmente la cultura en ese sentido, afirmaron médicos especialistas.
Señalaron que debido a esto se originan hechos como los denunciados en el Hospital Civil de Guadalajara, donde el médico responsable de los trasplantes de hígado, Luis Carlos Rodríguez Sancho, tenía una cuenta bancaria personal donde los pacientes depositaban hasta un millón de pesos por cirugía.
Aunque reconocieron que, de ser ciertas las acusaciones en su contra, Rodríguez Sancho habría faltado a la ética profesional, también lo es que en varias instituciones han surgido “ideas de buena fe”, con el objetivo de incrementar las donaciones y las cirugías de trasplante. El problema es que es muy alto el riesgo de que las buenas intenciones se desvíen a cuestiones de lucro e intereses personales.
Los especialistas consultados plantearon que desde la reforma a la Ley General de Salud del año 2000, y a pesar de las estadísticas oficiales, es muy poco lo que se ha avanzado. En ese año se instauró el andamiaje jurídico para la donación y trasplante de órganos y tejidos, y, entre otros, se establecieron los criterios para determinar la muerte cerebral de una persona, así como para lograr la creación del Cenatra.
En cambio, manifestaron, han proliferado problemas que se salen del control del centro que dirige Arturo Dib Kuri, como el de Guadalajara, u otros como las llamadas agencias de procuración de órganos que en algunas entidades operan fuera del marco legal.
Las agencias son organismos integrados por profesionales de la salud que se dedican a “buscar” personas que pudieran donar órganos. Se supone que su principal objetivo es incrementar la disponibilidad de tejidos en cualquier hospital, para pacientes que están en espera de un trasplante.
Al respecto, el director del Cenatra, Arturo Dib Kuri, explicó que hubo la intención de formalizar la existencia de las agencias. Sin embargo, desde el nivel federal se marcó una directriz muy clara sobre la imposibilidad legal de hacerlo.
Implicaría, dijo el funcionario, modificar la Ley General de Salud y el reglamento respectivo, porque la figura de las agencias de procuración es jurídicamente inexistente.
Es decir, comentó, habría el riesgo de que los órganos obtenidos en donación se asignaran de manera discrecional y sin la obligación de reportar a autoridad alguna.
Dib Kuri también mencionó que las agencias de procuración de órganos sólo existen en Estados Unidos. Cuentan con médicos subsidiados por el gobierno y cobran a los hospitales por cada órgano que consiguen en donación. Un esquema como éste no se aplica en México porque sería como privatizar los servicios médicos de trasplantes.
El Sistema Nacional de Trasplantes se ha enfocado en el fortalecimiento de las instituciones para que inviertan en sus programas y cuenten con personal capacitado para integrar los comités responsables de la disposición de órganos y tejidos, entre otras acciones.
No obstante, aseguraron algunos médicos, las agencias de procuración de órganos existen y se supone que están dedicadas al fomento de la donación. Jalisco es uno de los estados donde existe esta figura, externa a la estructura de los hospitales, como lo ha reconocido Rodolfo Morán, secretario técnico del Consejo Estatal de Trasplantes del estado.
En entrevista publicada en la revista del Cenatra, el funcionario aseguró que las agencias “son una necesidad en este momento... es un grupo bien preparado de profesionales que lo único que hacen es cooperar con hospitales que no tienen coordinador de donación, detectando posibles donadores, hablando con el personal de salud para mejorar su actitud hacia los trasplantes, y en caso de ser necesario, participar en la obtención de los órganos, sin intervenir para nada en la asignación, ni siquiera en la distribución”.
Dijo que la existencia de la agencia de procuración es transitoria, mientras los hospitales del estado de Jalisco designan a sus coordinadores de donación.
“La agencia es algo transitorio, para poner el ejemplo. Una vez que los hospitales tengan su coordinación, nos despedimos y nos dedicamos a otra cosa”, finalizó.