El libro de Saint-Exupéry es el más buscado por los niños
El Principito derrota a Harry Potter en la FILIJ
Presentarán hoy colección de relatos de Verdehalago
Exponen dibujos inéditos del autor francés
En el primer día de actividades de la Feria Internacional del Libro Infantil y Juvenil (FILIJ), El Principito es una de las atracciones principales. La transparencia, la agudeza inocente, la contundente franqueza del personaje de Antoine de Saint-Exupéry continúa ejerciendo su fascinante y misterioso influjo sobre las nuevas generaciones.
En el local 313 de la Universidad de Lyon hay un letrero: “Gane un principito”. Al fondo, sobre un estante, las portadas de decenas de ejemplares se exhibe al personaje en una de sus imágenes más conocidas, también de Exupéry. Eso es suficiente para atraer a los niños y sus padres que se amontonan frente al estand porque quieren ganarse “un principito”.
Lo único que tienen que hacer es leer una breve ficha biográfica sobre Antoine de Saint-Exupéry y después responder a las preguntas que les hacen las responsables del local. La idea es de una de ellas, la estudiante mexicana Layidua Pineda, egresada de la UAM Azcapotzalco, quien cursa un doctorado en la Universidad de Lyon, donde integra un programa que se llama jóvenes embajadores. Ella representa a México y propuso este proyecto para promover esa ciudad francesa.
El proyecto incluye una exposición de bocetos inéditos de Saint-Exupéry que serán exhibidos en la FILIJ 2007 y una representación en teatro guiñol de pasajes de El Principito. El creador del teatro guiñol, informa Layidua Pineda, también es de Lyon.
Agrega además que en todo el mundo El Principito está traducido a 180 idiomas, 10 de ellos variantes dialectales de una lengua de India. Asegura que después de La Biblia y El Corán, El Principito es el libro más traducido.
No es raro que por lo menos en este primer día de feria, al personaje de Saint-Exupéry no le haga ni sombra Harry Potter, con todo y la maquinaria publicitaria que le precede.
Aunque en las primeras horas el flujo de visitantes es bajo en relación con años anteriores, aumenta notoriamente conforme avanza el día. Familias enteras, palomillas de adolescentes y contingentes escolares.
José Manuel Palacios, responsable del espacio de Porrúa dice que van bien las ventas. Que lo que más le piden es uno sobre La Familia Burrón, así como La Iliada y El Conde de Montecristo. “Hay mucho interés”, asegura.
En cambio Lisette Ruiz, de Editorial Norma, dice que ve un poco menos de movimiento, pero nota que los niños preguntan más: “Antes se iban directo sobre los de Disney, pero ahora vienen a buscar otros y preguntan. Pero como que falta difusión de la feria, como que este año no hubo tanta”.
El caso de Leticia Jiménez de la Editorial Verdehalago es admirable y conmovedor. Sin la maquinaria publicitaria de los grandes sellos, ni un gran equipo de ventas y distribución, sin lujosas ediciones, participa con una oferta que apela al gusto y a la sensibilidad de los niños: “Tengo una colección de textos muy breves, historias bien resueltas, sin ilustraciones”, en las que por medio del humor y el suspenso atrae a los lectores.
La colección, que se presenta este domingo a las cinco de la tarde en la FILIJ, está integrada por 29 títulos, tales como Perro, el perro, la sencilla “historia de un perro que está buscando que lo quieran, o la de una familia que gana un concurso y su premio es que el presidente vaya a cenar a su casa y todo lo que se desencadena. O El hombre sin oreja, que cada día cuenta una historia diferente de cómo perdió la oreja”.
Leticia Jiménez no se dedica a esto por dinero, sino por el gran amor que le tiene a la lectura, a la que ella se acercó desde que era niña y que después ha compartido con su hijo: “Soy editora desde hace 17 años y lo hago porque me apasiona, para mí es una cuestión de interés personal”.