Usted está aquí: martes 13 de marzo de 2007 Política Reprochan a Zedillo violaciones a derechos durante su mandato

Elogia en Madrid lucha del Ejecutivo contra el narco

Reprochan a Zedillo violaciones a derechos durante su mandato

ARMANDO G. TEJEDA CORRESPONSAL

Madrid, 12 de marzo. El fantasma de la matanza de Acteal y del conflicto en Chiapas se le volvió a aparecer al ex presidente de México Ernesto Zedillo, quien en el contexto de una conferencia en Madrid fue interpelado por un grupo de activistas internacionales por su vinculación con el régimen totalitario priísta y la violación a los derechos humanos durante su gestión.

El ex mandatario defendió sus "credenciales democráticas" y posteriormente elogió la decisión del jefe del Ejecutivo, Felipe Calderón, de utilizar a las fuerzas armadas en la lucha contra el narcotráfico.

Zedillo viajó a Madrid para debatir con el ex presidente español Felipe González, moderados por el juez Baltasar Garzón, sobre el tema genérico Derechos humanos y seguridad jurídica, encuentro que se llevó a cabo en el Instituto Internacional y fue organizado por la Obra Social La Caixa y la New York University.

Cuando el magistrado se disponía a iniciar el foro, una activista se levantó de su silla y espetó: "¿cómo pueden hablar ustedes de derechos humanos si usted, Zedillo, es el responsable de la masacre de Acteal, y usted, señor González, es asesor del hombre más rico de América Latina?"

El ex mandatario mexicano soltó una risa nerviosa, levantó la ceja y vio, segundos después, cómo los servicios de seguridad del encuentro se llevaban a empujones a la joven simpatizante de la causa zapatista.

Después de un comienzo tan abrupto, el juez Garzón intentó centrar el debate en el análisis de los sistemas judiciales de América Latina y sus consecuencias funestas en el desarrollo y el respeto de los derechos humanos. La primera cuestión que se planteó al mexicano fue si en la región se vive todavía la "era de la desilusión", ante la ausencia de resultados en el bienestar de la sociedad. "Creo que todavía estamos en la era de la desilusión. Hace años hicimos una serie de reformas con la esperanza de que fueran el empiezo de nuestro despegue definitivo, pero eso no ha ocurrido. La brecha del bienestar ha empeorado, pero no sólo en nuestro país, sino también en otras naciones emergentes que han encontrado otras vías para alcanzar el desarrollo y el bienestar más rápido", respondió.

Una vez que Zedillo reconoció que en la mayoría de los países latinoamericanos reina la "desilusión", ante el fracaso del modelo neoliberal de los pasados 20 años para llevar más justicia y bienestar a todas las capas de la sociedad, el ex mandatario matizó: una de las razones de ese rezago es la falta de "solidez de las instituciones. No creo que sea previsible una crisis de valores ni una amenaza real, lo cual no quiere decir que la democracia esté consolidada, que es algo más", añadió.

Según el ex jefe del Ejecutivo, "en América Latina hay un problema grave: el exceso de arbitrariedad en los gobiernos. No hay proceso de modernización y consolidación de la democracia mientras no disminuyan las cuestiones de discrecionalidad".

Cuando el ex presidente mexicano se disponía a responder otra cuestión planteada por Felipe González, un joven español se levantó de su asiento para preguntarle a viva voz: "¿cómo puede hablar de derechos humanos y de democracia un hombre cuyo partido estuvo 75 años en el poder de forma ilegal?"

Entonces, entre airado y confuso, Zedillo respondió: "efectivamente, fui el último presidente de un partido de gobierno en el poder. Pero también fui el mandatario que convocó a todos los partidos políticos a hacer una reforma política, cuyo objetivo era alcanzar la normalidad democrática en el país. No hice esas modificaciones políticas para que mi partido perdiera o retuviera el poder. Las hice para que hubiera democracia. Una consecuencia de esos cambios, que fueron pactados, votados y acordadados por los partidos políticos, fue que el mandatario que me sucedió no era de mi partido. Y por haber encauzado esas enmiendas, pues realmente no le voy a pedir disculpas a nadie. Tampoco a usted. O sea, mis credenciales democráticas están ahí".

Minutos después, otra joven, quien estaba en otro punto del foro, criticó la política de Ernesto Zedillo en el conflicto de Chiapas y la sistemática violación a los derechos humanos durante su gobierno. En este ocasión el ex mandatario simplemente giró la cabeza y vio cómo, por segunda vez, se llevaban a empujones a otra activista crítica de su administración.

Posteriormente el ex jefe del Ejecutivo mexicano se refirió a la visita del mandatario de Estados Unidos, George W. Bush, a América Latina, a quien elogió por tener las "ideas correctas desde el principio" en el tema de la migración. Sin embargo, criticó el retraso de esta gira: "creo que es mejor tarde que nunca, pero hubiera sido mucho mejor para los intereses de América Latina y de Estados Unidos que esa decisión del presidente Bush se hubiera tomado antes".

En ese sentido, instó al gobierno de Bush a liberalizar el comercio agrícola con la región y a acelerar sus proyectos de regularización de migrantes residentes, así como a ampliar el cupo legal de mano de obra extranjera.

Zedillo culminó su intervención con un encendido elogio a los primeros 100 días de gestión de Calderón, al señalar que "había la sensación en meses recientes, el año pasado, de que el crimen organizado había montado una verdadera ofensiva y sus actos habían tomado un carácter bastante violento. Por lo mismo, riesgoso no sólo para la seguridad de las personas, sino para las propias instituciones. En ese sentido, creo que Calderón ha sido muy acertado al haber escogido este tema como uno de los iniciales para el trabajo de su gobierno. Obviamente el presidente, en estos primeros meses de su mandato, ha tenido que echar mano de los instrumentos legales a disposición del Estado. Y la Constitución deja claro que el Ejército, bajo ciertas circunstancias, puede ser utilizado como lo ha venido haciendo Calderón Hinojosa. Ahora, supongo, porque es jurista, que él sabe que habrá que construir otro tipo de instrumentos si se trata de hacer un esfuerzo realmente institucional. Lo que todos reconocemos es que las instituciones y los medios que están a disposición del Estado mexicano han sido insuficientes para hacer valer el estado de derecho".

Antes de dar por cerrado el debate, otro joven intentó cuestionar al ex mandatario mexicano por su responsabilidad en la matanza de Acteal, pero otra vez los responsables de la seguridad lo expulsaron de manera violenta del aula.

Zedillo tuvo que dejar el recinto por la puerta de atrás, pues fue alertado de que un grupo de activistas lo esperaba en la entrada principal con pancartas alusivas a Acteal y a la violación a los derechos humanos en Oaxaca y San Salvador Atenco.

 
Compartir la nota:

Puede compartir la nota con otros lectores usando los servicios de del.icio.us, Fresqui y menéame, o puede conocer si existe algún blog que esté haciendo referencia a la misma a través de Technorati.