Usted está aquí: sábado 23 de diciembre de 2006 Sociedad y Justicia Niega la Iglesia entierro católico a Welby

"Contraria a la doctrina" cristiana, la voluntad de poner fin a su vida, aduce

Niega la Iglesia entierro católico a Welby

Políticos democratacristianos exigen arrestar por homicidio al médico Mario Riccio

AFP, DPA, REUTERS

Ampliar la imagen Piergiorgio Welby, en foto de archivo Foto: Reuters

Roma, 22 de diciembre. El vicariato de la Iglesia católica en esta ciudad informó hoy su decisión de negar un entierro religioso a Piergiorgio Welby, el hombre de 60 años que padecía una enfermedad incurable y quien murió tras de ser desconectado de los aparatos de respiración que lo mantenían vivo, al tiempo que prominentes políticos demócratacristianos exigieron a las autoridades del país que arresten bajo cargos de homicidio al médico Mario Riccio, responsable de la desconexión de su paciente.

"La voluntad de Welby de poner fin a su vida, afirmada de manera repetida y pública, es contraria a la doctrina de la Iglesia", señaló el vicariato en su fundamentación de la negativa a la solicitud de entierro religioso formulada por la madre y la esposa del difunto.

La decisión del vicariato romano fue dada a conocer después de que un sacerdote de la parroquia San Juan Bosco de esta ciudad había anunciado la suspensión de "los preparativos para los funerales, a causa del eco mediático suscitado por este asunto".

Ante la determinación del vicariato, los familiares de Welby comenzaron a hablar de la posibilidad de que la ceremonia fúnebre se lleve a cabo en una plaza pública, el domingo próximo.

Un día después del fallecimiento de Welby, el debate sobre la necesidad de que Italia revise su legislación sobre la eutanasia se ha extendido en la opinión pública.

"Esta claro que una vez iniciado el debate, ahora debe continuar", dijo el jefe de gobierno, el izquierdista Romano Prodi, al referirse a los señalamientos de abogados y autoridades legislativas y judiciales, en el sentido de que existe un vacío jurídico sobre el asunto.

La falta de una legislación que específicamente tipifique como delito la cancelación de terapias a enfermos terminales ha dejado en suspenso la posibilidad de que el médico Riccio sea detenido y procesado bajo el cargo de homicidio.

No obstante, el legislador Luca Volante, miembro de la Unión Demócrata Cristiana (el partido que dominó la política italiana desde la posguerra hasta el ascenso del derechista Silvio Berlusconi, en 2001), clamó hoy que "los responsables de este asesinato deben ser arrestados".

Riccio fue interrogado el jueves por la tarde después de haber confesado en una conferencia de prensa que él mismo desconectó el aparato de Welby, quien desde hace 40 años padecía distrofia muscular progresiva, una enfermedad degenerativa e incurable, que había provocado su confinamiento en una cama.

"Los últimos días fueron terribles. No podía ayudarlo a sentarse. No aguantaba más. Me decía ¡basta!, ¡basta!", relató Mina, esposa del difunto, quien cuenta con el apoyo del pequeño Partido Radical, una organización que promueve ideas libertarias, que luchó por la legalización del aborto en 1981 y del divorcio en 1974.

 
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