El mandatario brasileño mantiene la calma ante la agresividad del socialdemócrata

Alckmin acusa a Lula de pasivo, débil y tener "amigos corruptos" en el PT

DPA, AFP Y REUTERS

Brasilia, 8 de octubre. El candidato socialdemócrata a la presidencia de Brasil, Geraldo Alckmin, aprovechó hoy el primer debate con el actual mandatario y aspirante a la relección, Luiz Inacio Lula da Silva, para tratar de vincular a su gobierno con sucesivos casos de corrupción, con una actitud pasiva ante la "inundación" de mercancías chinas y con una reacción "débil" ante Bolivia, cuando este país nacionalizó sus hidrocarburos, en detrimento de la estatal Petrobras.

Lula, que mantuvo siempre la calma frente a un agresivo rival, intentó eludir las acusaciones de corrupción con advertencias de que Alckmin pretende continuar con el plan de privatizaciones iniciado por el ex presidente socialdemócrata Fernando Henrique Cardoso (1995-2002).

De cara a la segunda vuelta programada para el 29 de octubre, los candidatos debatieron durante poco más de dos horas.

Apenas iniciado el programa difundido por la TV Bandeirantes, Alckmin retó a Lula a informar sobre el origen de unos 800 mil dólares incautados por la Policía Federal a miembros del Partido de los Trabajadores (PT), hace tres semanas.

Según Alckmin, Lula debería saber el origen del dinero, que sería usado para comprar "un dossier" con acusaciones de corrupción contra políticos socialdemócratas.

"No soy policía, soy presidente de la República. Quizás el candidato (Alckmin) extrañe el tiempo de la tortura, cuando en media hora uno ya sabía todo", contestó Lula, pero Alckmin respondió que "no es necesario torturar" para descubrir el origen del dinero: "Fue incautado en manos de miembros del PT. Es suficiente con que le pregunte a sus amigos, presidente".

Sobre las relaciones exteriores, Alckmin dijo que Lula permitió que Brasil fuera "humillado" por Bolivia en el episodio de la nacionalización de las reservas de hidrocarburos en el país andino, a mediados de este año, porque según el socialdemócrata, el gobierno de Evo Morales expropió "activos de Petrobras".

"Bolivia hizo con su gas lo que todos los países del mundo hicieron con su petróleo", reviró el mandatario.

Respecto de las relaciones con China, Alckmin acusó al petista de permitir que el país asiático "inundara" Brasil con sus productos, "quebrando nuestra industria de calzados, nuestra industria de juguetes, nuestra industria de tecnología".

Lula sostuvo que en su gobierno Brasil adoptó una política externa "osada", porque dejó de ser "dependiente de dos bloques, Estados Unidos y la Unión Europea" y logró aumentar sus exportaciones, de 60 mil millones a 134 mil millones de dólares.

El mandatario llegó al debate con 54 por ciento de las intenciones de voto, según la encuesta más reciente de Datafolha, que le da 46 por ciento a Alckmin.

Según la prensa brasileña, una de las razones por las cuales Lula no ganó la relección en la primera vuelta fue por la ausencia del mandatario en los debates con los demás candidatos, especialmente en el organizado por TV Globo, puesto que en cada alusión al petista, la imagen televisiva mostraba el sitio vacío.