Usted está aquí: lunes 9 de octubre de 2006 Deportes Defendió Potros anotación tempranera mientras Pumas mostró ineficaz ataque

Tanto de Biscayzacú al minuto tres dio al Atlante la ventaja de manejar el partido

Defendió Potros anotación tempranera mientras Pumas mostró ineficaz ataque

Ricardo Ferretti admitió que sus pupilos exageraron en mandar ollazos al área azulgrana

CARLOS HERNANDEZ

Ampliar la imagen El defensa auriazul Horacio Cervantes obstruye el tiro del delantero puma Ariel González Foto: Luis Humberto González

La minúscula porra azulgrana estalló en una sonora exclamación que inundó el estadio Olímpico Universitario y acalló a los estruendosos fanáticos locales cuando el vituperado árbitro Mauricio Morales determinó el final del partido y el triunfo del Atlante por 1-0.

Se había concretado la tercera derrota de los Pumas en el torneo y los fieles universitarios, que realizaron una aceptable entrada en CU, emprendieron una triste salida bajo las agresiones verbales de los puntillosos fanáticos Potros que los despidieron a su manera: "Los Pumas ya se van, pero a la ch...

"¡Qué desciendan!, ¡qué desciendan!" fue el siguiente grito de burla antes de que ambas fanaticadas intercambiaran mentadas de tribuna a tribuna.

Potros anotó un gol apenas al minuto tres y a partir de ahí se defendió con pezuñas y dientes, además de que se favoreció por un arbitraje polémico y unos Pumas que se limitaron a mandar balonazos al área que fueron controlados por los atentos zagueros azulgranas y por un siempre confiable arquero Vilar.

Los equipos apenas se estaban acomodando cuando el ex universitario Olalde realizó jugada por el centro y mandó un milimétrico pase filtrado a Biscayzacú, quien sin marca dentro del área enfrentó a un indefenso Bernal. El arquero local se resbaló y cayó de fea manera, por lo cual se lesionó el codo derecho y dejó la valla abierta para que el uruguayo marcara sin problemas el único tanto del partido.

Bernal, quien fue sustituido por Rogelio Rodríguez, sufrió luxación del codo derecho, que tendrá siete días inmóvil, y podrá regresar después de seis semanas. Y Olalde desapareció, hasta que fue relevado, oscilando sin chiste entre media cancha y delantera.

Los Potros ya sólo se acercaron una vez al área local, en tiro del Pato Galaz que el apodado Ro-Ro desvió a corner, mientras los Pumas tuvieron aproximaciones en los botines de Efraín Velarde y la llamada delantera jabonosa, integrada por los Arieles, López y González.

Al 28 se presentó la jugada polémica. Ariel González peleó el balón con Horacio Cervantes y Vilar, y logró que el esférico llegara al Chupa López, quien anotó para provocar algarabía, pero el auxiliar José Camargo consideró que Ariel había cometido falta y Morales rectificó su marcación inicial, lo que ocasionó los clásicos gritos terminados en "ero-ero".

A dos minutos de finalizar el primer periodo Daniel Alcántar realizó barrida por atrás sobre Parejita López y sus zapatos anaranjados fosforescentes, y fue expulsado de inmediato.

Para el complemento los azulgranas se defendieron con nueve elementos, tan sólo con Galaz en punta, pero fueron ayudados por unos Pumas que sólo lanzaron balonazos al área, fácilmente rechazados por el grandote Cervantes. Además la fortuna se vistió azulgrana, ya que Ariel González mandó el balón al travesaño en un disparo de parte externa.

Luego la falla fue del Pikolín Palacios, quien sin marca en el área entregó un débil cabezazo a Vilar.

Poco a poco los Potros adelantaron líneas y tuvieron disparos del recién ingresado Rergis y de Cervantes, quien estuvo cerca de sorprender al Ro-Ro, pero éste alcanzó a regresar y con las uñas sacó el esférico sobre el larguero.

Cerca del final fue expulsado Verón, por doble tarjeta amarilla, y será una baja sensible para la causa auriazul.

El Tuca Ferretti tardó en llegar a la conferencia y lo hizo con gesto hosco. "Tengo gran molestia y gran frustración", expresó el técnico y admitió que su escuadra "exageró en los ollazos", aunque consideró que tuvieron cuatro o cinco oportunidades de gol.

No se justificó en el tanto anulado porque "caería en una excusa" y dio por justificados los abucheos de sus propios aficionados: "Fue por una justa razón", definió.

Por su parte, René Isidoro García destacó el "sacrificio impresionante" de sus pupilos, aunque admitió que "Pumas no merecía perder".

Aunque aceptó que su equipo jugó a la defensiva -"a veces queda de lado jugar bien", justificó-, resaltó que se alejaron de Pumas en la tabla del porcentaje y "dimos un paso muy importante a la liguilla".

 
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