Documenta ONG que el grave debilitamiento de las instituciones va en aumento
Cada mes estallaron 72 conflictos sociales en el primer semestre de 2006
En el Distrito Federal y estado de México se presentaron la mayor cantidad de disputas
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La Conferencia del Episcopado Mexicano demandó trabajar en favor de los más pobres para evitar que durante la actual temporada de lluvias enfrenten tragedias, por habitar en zonas de alto riesgo. En la imagen, trabajos en la cuenca de un río en Ciudad Juárez
Foto: Notimex
Durante el primer semestre de este año surgieron más de 432 conflictos sociales en el país, lo que demuestra que el debilitamiento de las instituciones va en aumento, revela el Observatorio de la Conflictividad Social, auspiciado por Serapaz, en su primer informe en torno al tema.
Pablo Romo, coordinador del análisis, aseveró que en la mayoría de los conflictos estudiados se han presentado violaciones a los derechos humanos, como el abuso de autoridad, impunidad, además de la represión física de la fuerza pública en diversos grados de intimidación, "hasta el grado de brutalidad, como en los casos de Sicartsa, en Michoacán; Atenco y contra el magisterio oaxaqueño".
Indicó que contrario a la percepción social, los problemas se generan principalmente por razones económicas y de servicios, y no por la lucha de poder o identidad. Destacó que en 40 por ciento de los casos la demanda central está ligada al tema económico; seguida por la defensa y seguridad personal y patrimonial con 18 por ciento. En menor grado, otras causas son el poder, la necesidad de cambio, la búsqueda de oportunidades de desarrollo e inclusión.
Los conflictos económico-laborales re-presentaron 30 por ciento del origen de los problemas sociales; con 22 por ciento los relacionados a infraestructura y servicios, y la lucha rural por recursos naturales y agrarios representaron 21 por ciento del total de los casos analizados.
El estudio revela que los actores sociales que más aparecen como involucrados en los conflictos son los servidores públicos, con 46 por ciento, seguidos por los campesinos con 10 por ciento, empleados con 8, y los empresarios, con 7 por ciento.
Asimismo, agrega el informe, uno de cada cinco conflictos es protagonizado por obreros o trabajadores agrupados en algún sindicato.
Distrito Federal y el estado de México son las dos entidades del país en la que se presentan la mayor cantidad de conflictos sociales, informó Romo; sin embargo, destacó, ello no significa que las problemáticas se hayan generado ahí, pues alrededor de 25 por ciento de los actores se desplazan desde su lugar de origen hasta la ciudad, "debido a que perciben que no lo pueden solucionar en su propia entidad".
El informe revela que los estados que siguen al DF y estado de México durante los primeros seis meses de 2006 fueron: Oaxaca, Guerrero, Chiapas, Michoacán, Veracruz, Jalisco e Hidalgo, con porcentajes que fluctúan entre 2.5 y 3.5 por ciento del total en cada uno.
El investigador señaló que la problemática social se presenta principalmente en centros habitados marginados, grupos organizados, pequeñas comunidades, núcleos de estudiantes y trabajadores, así como entre indígenas y campesinos; que representan los sectores más vulnerables de la sociedad.
Aseveró que el desarrollo en la confrontación del problema evoluciona en la medida que no se presenta solución al mismo. Dijo que al principio la mayoría de los casos analizados usó la movilización, la denuncia pública y los bloqueos, junto con la demanda legal.
Las primeras tres formas son usadas por comunidades organizadas o de la sociedad civil y sindicatos; mientras que la demanda legal es "muy socorrida por individuos, sindicatos y partidos políticos ". Romo dijo que "a medida que pasa el tiempo nos hemos percatado que las estrategias de confrontación varían considerablemente, ya que en principio se busca su visibilidad".
Subrayó que los principales conflictos sociales que se generaron durante este periodo son: las represiones en Lázaro Cárdenas y Atenco, el caso de los maestros en Oaxaca, los problemas generados a partir de la aprobación de la ley Televisa, la migración, la reacción social en torno al narcotráfico, la lucha por la equidad en la repartición del agua, los problemas generados a partir del proceso electoral, y el caso Lydia Cacho.
Finalmente, dijo que en la mayoría de los casos los medios de comunicación no dan seguimiento a las problemáticas, debido a que sólo se ubican en la etapa de visualización. Informó que en 100 por ciento de los casos de análisis los actores "están seguros de que resolverán su conflicto".