Usted está aquí: martes 25 de julio de 2006 Política Empresa turística beneficiada por jueces, gran donadora a Vamos México

Tribunal colegiado favoreció a Mayan Resorts con terrenos estratégicos en Nayarit

Empresa turística beneficiada por jueces, gran donadora a Vamos México

En 2003 aportó a la fundación de Marta Sahagún de Fox poco más de $17 millones

JESUS ARANDA

Ampliar la imagen La empresa Desarrollo Marítimo Puerto Vallarta ha sido favorecida por la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales con permisos para la ampliación de actividades turísticas complementarias Foto: Archivo La Jornada

La empresa turística Desarrollo Marítimo Puerto Vallarta SA de CV, que recientemente fue beneficiada, en circunstancias sospechosas -lo que motivó una queja formal contra dos magistrados ante el Consejo de la Judicatura Federal (CJF)-, por el tercer tribunal colegiado en materia civil del tercer circuito con la posesión de un terreno estratégico en la costa de Bahía de Banderas, Nayarit, donó en 2003 a la Fundación Vamos México 17 millones 395 mil 200 pesos, con lo cual ocupa el tercer lugar entre todos los benefactores de la organización que dirige Marta Sahagún de Fox.

Creada el 26 de marzo de 1984 (escritura pública 25,776) bajo la razón social Desarrollo Marítimo Puerto Vallarta SA de CV, con capital inicial de 15 millones de (viejos) pesos, está formada por Daniel Jesús Chávez Morán, Alma Lydia Saúl Solís de Chávez, Jesús Raúl Chávez Escárcega, Adriana María Rodríguez de Chávez, Ricardo Chávez Morán y María Elena Mendoza Cedeño de Chávez. Esta compañía es propietaria de la cadena Mayan Resorts, que posee los exclusivos hoteles Mayan Sea Garden Acapulco, Mayan Sea Garden Mazatlán, Mayan Sea Garden Nuevo Vallarta y Mayan Palace, en Cancún.

En lo que respecta al desarrollo turístico en Bahía de Banderas (Mayan Sea Garden Bahía de Banderas), hay el antecedente de que el juicio en el que los magistrados Arturo Barocio Villalobos y Guillermo David Vázquez Ortiz le dieron la razón como "tercero perjudicado" permitió a la compañía comprar un terreno que incluyó dos hectáreas que habían sido vendidas en el año 2000 a Flavio Torres Ramírez -quien firmó la compraventa del predio con Eduardo Culebro Romero previo anticipo de un millón 400 mil pesos, con un acuerdo para el pago posterior de otros 2 millones 100 mil pesos, antes de que éste muriera, en noviembre de ese año-, en una decisión judicial que motivó una queja formal ante el CJF, por la forma en que los magistrados resolvieron en su favor.

Esto, luego de que un juzgado federal había dado la razón al comprador original para que se respetara la adquisición del inmueble, después de la muerte del propietario original.

Y es que los magistrados Barocio Villalobos y Vázquez Ortiz ignoraron la existencia del primer contrato de compraventa, y convalidaron que la viuda del finado, en su calidad de albacea de la herencia, vendiera el terreno a la desarrolladora turística, sin tomar en cuenta que había un contrato firmado entre las partes que debió cumplirse, y dejando de lado una jurisprudencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación que señala: "El contrato privado de compraventa de inmuebles en el que fallece una de las partes antes de que se haya verificado el acto reclamado constituye prueba suficiente para acreditarlo".

Por lo que se refiere a la actividad de Desarrollo Marítimo Puerto Vallarta SA de CV, fue favorecida en el año 2000 con un permiso de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) para la ampliación de "actividades turísticas complementarias" en su hotel de Bahía de Banderas por un periodo de 15 años, precisamente en un terreno que colinda con el que obtuvo recientemente mediante el fallo judicial referido.

Asimismo, la Semarnat concedió de manera irregular la autorización a Mayan Palace Cancún para la realización del proyecto Mayan Palace secciones Tikal, Uxmal y Tulum, el cual fue cancelado después de casi cuatro años de un litigio en el que el Centro Mexicano de Derecho Ambiental denunció la ilicitud de los permisos, al quedar demostrado que la empresa "movió las 70 hectáreas de su predio a más de un kilómetro de donde está y en lugar de haber obtenido una autorización para construir un máximo de 699 cuartos, construyó 2 mil 800".

El centro aseveró que "el caso del Mayan Palace es sólo uno de los muchos casos con irregularidades de este tipo que se presentan" en Quintana Roo.

Por otra parte, en 2003 la empresa fue una de las beneficiarias de Vamos México, organización que preside Marta Sahagún, y según el informe de donativos recibidos de enero a diciembre de 2003, Desarrollo Marina Vallarta apoyó la causa de la esposa del presidente Vicente Fox con un total de 17 millones 395 mil 200 pesos; además, la empresa Desarrollo Inmobiliario Nueva Vallarta SA de CV que forma parte, según información en Internet, del mismo consorcio donó en el mismo periodo 3 millones 500 mil pesos.

Cabe señalar que según el informe anual de Vamos México en 2003, la desarrolladora turística ocupó el tercer lugar en la entrega de donativos en el ámbito nacional, superada únicamente por Televisa, con 25 millones de pesos, y Visión México, con 20 millones 814 mil 500 pesos; además, sus aportaciones fueron mayores que los "donativos entregados por el acuerdo de redondeo celebrado con la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio (ANTAD)", que sumaron ese año 17 millones 51 mil 54 pesos.

La forma de actuar de esta empresa ha sido cuestionada directamente por la Procuraduría Federal del Consumidor, la cual el 25 de junio de 2005 hizo un recuento de las empresas de "tiempo compartido" que menos cumplen con sus obligaciones.

La dependencia colocó a Desarrollo Marina Vallarta como la que más quejas recibió, con 569, de un total de 2 mil 31 recibidas en un periodo de 2002 a marzo de 2005, por concepto de "incumplimiento de contrato y negativa del proveedor a la rescisión del contrato".

 
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