Usted está aquí: domingo 23 de julio de 2006 Cultura Los mexicanos trabajan para el cuento: El Fisgón

Presenta su primer libro infantil

Los mexicanos trabajan para el cuento: El Fisgón

ANGEL VARGAS

Ampliar la imagen El Fisgón, con su público infantil Foto: Yazmín Ortega Cortés

¿Oiga, usted trabaja para el cuento? La pregunta toma por sorpresa a Rafael Barajas El Fisgón, quien sonríe y responde: "Todos los mexicanos trabajan para el cuento, sobre todo los políticos, y hay unos que ahorita trabajan para el recuento de votos".

Por de quien se trata y la respuesta dada, pareciera que fuese un acto más de tipo político y no la presentación de un libro infantil. Sin embargo, sí lo es, y ni más ni menos se trata del libro Travesuritis aguda, escrito e ilustrado por el mencionado caricaturista de La Jornada, el primero de este tipo que escribe.

El acto tuvo lugar el mediodía de este sábado, en el Centro Cultural Bella Epoca, con la presencia y la participación de decenas de niños y padres de familia, que disfrutaron y rieron con ganas con las ocurrencias de la cuentacuentos Elia Crotte, quien lo mismo cantó e hizo cantar que contó la trama contenida en dicho volumen.

Este aborda cómo, de la noche a la mañana, dos niñas exageradamente bien comportadas, incluso tanto como para preocupar a sus padres, se transforman en unas latosas de primer nivel, debido a una extraña enfermedad proveniente de excéntricas tierras.

Una vez concluida la intervención de la cuentacuentos, apareció El Fisgón, quien tras una breve presentación, abrió una ronda de preguntas y respuestas. Y así, después de satisfacer la curiosidad de un pequeño no mayor de cinco años respecto de por qué trabaja para el cuento, el monero debió contestar a otra pequeñita que escribe cuentos, no porque se trate de un deseo, sino de una necesidad.

Confesó también que la historia del mencionado volumen, editado por el Fondo de Cultura Económica, en su colección A la orilla del viento, "es totalmente autobiográfica", al hacer referencia a las divertidas travesuras de sus dos hijas.

La literatura infantil no es un terreno en el que se sienta extraño el creador, a su propio decir. No sólo porque ha ilustrado más de una quincena de volúmenes de este género, sino que, especificó, toda su vida he sido historietista y caricaturista político, dos géneros que están a caballo entre la literatura y el dibujo.

"En realidad, hacer historietas es hacer este tipo de cosas. Es ya un trabajo literario. El trabajo de cuentero tiene mucho que ver con el de caricaturista político. En ese sentido, no me he sentido fuera de lugar, tan raro. Me divierte y encanta hacer este tipo de trabajo", agregó.

De acuerdo con El Fisgón, una de las mejores formar para acercar a los niños a los libros y la literatura es ofrecerles materiales que sean divertidos y tengan que ver con su vida cotidiana; si no, "se tiene poco chiste".

 
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