Usted está aquí: viernes 16 de junio de 2006 Sociedad y Justicia Solicita funcionaria poblana que no se le investigue por el caso Cacho

Datos desacreditan imputaciones de la periodista, aduce

Solicita funcionaria poblana que no se le investigue por el caso Cacho

GUSTAVO CASTILLO GARCIA ENVIADO

Mazatlán, Sin., 15 de junio. La procuradora de justicia de Puebla, Blanca Laura Villeda, solicitó a la Procuraduría General de la República (PGR) que la titular de la Fiscalía Especializada para la Atención de Violencia contra las Mujeres, Alicia Elena Pérez Duarte, deje de integrar una averiguación previa por presuntos delitos cometidos contra la periodista Lydia Cacho Ribeiro.

La exigencia, dijo, se basa en que Pérez Duarte ha manifestado públicamente su amistad con la autora del libro Los demonios del Edén, y además, porque tampoco se pueden integrar dos investigaciones por los mismos hechos.

Entrevistada en el contexto del encuentro de presidentes de tribunales y procuradores de justicia, que se realiza en este puerto turístico, la procuradora poblana aseguró que ha aportado información que desacredita las imputaciones que realizó la periodista, en el sentido de que se violaron sus garantías individuales al ser detenida y encarcelada en diciembre pasado.

Blanca Laura Villeda indicó que esperará a que la comisión designada por la Suprema Corte de Justicia de la Nación dé a conocer los resolutivos de su investigación, ya que "si bien es una cuestión de carácter moral, no se puede dejar de lado que es una situación que repercutirá en lo que se refiere al ámbito penal, y para evitar cualquier malentendido, preferimos no hablar del tema, y que la Corte tenga plena libertad para resolver con apego a derecho".

Indicó que ante la comisión del máximo tribunal no sólo dio sus puntos de vista de lo ocurrido en el caso de Lydia Cacho, sino que también aportó pruebas documentales de sus actuaciones, como fue el expediente completo y la orden de captura librada contra la periodista, motivo por el cual se le encarceló durante varios días en Puebla, en diciembre del 2005.

Mencionó que las pruebas, videos y grabaciones, que entregó la periodista al Ministerio Público servirán para demostrar que las autoridades de Puebla actuaron con apego a derecho en la detención.

Señaló que en esas testimoniales se aprecia que Cacho no fue objeto de malos tratos durante su captura; "que en todo momento se cumplió en lo establecido por la ley, ya que claramente se ve que son tres elementos de la policía los que cumplen el mandamiento judicial; que le muestran la orden, e inclusive, que un colaborador de la periodista la acompaña a la patrulla (antes de ser trasladada de Cancún a Puebla) y que ella se sube voluntariamente a la unidad; no hay ningún tipo de jaloneo o amenaza" en contra de la informadora.

 
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