Usted está aquí: viernes 19 de mayo de 2006 Sociedad y Justicia En 10 estados, asesinadas más de 6 mil mujeres en seis años

Investigación sobre violencia revela los casos ocurridos, exponen en un foro

En 10 estados, asesinadas más de 6 mil mujeres en seis años

Inaceptable la negativa de autoridades para hacer frente al problema, considera diputada

ROBERTO GARDUÑO

Ampliar la imagen Protesta frente a Los Pinos en junio del año pasado ante la falta de eficacia del gobierno para resolver los asesinatos contra mujeres en Ciudad Juárez Foto: Guillermo Sologuren

La violencia de género en México provocó la muerte a 6 mil niñas y mujeres entre los años 1999 y 2005, reveló la Investigación Diagnóstica Sobre Violencia Feminicida en 10 estados del país. Las acciones para contrarrestar dicha calamidad "son débiles y no abarcan a los tres niveles de gobierno; sólo están dirigidas de manera parcial y con baja incidencia por atender casos de violencia familiar".

La revelación esgrimida en el foro Acciones y Avances para Erradicar la Violencia Feminicida documenta casos específicos en distintas entidades federativas, en torno a agresiones que ocasionaron la muerte de mujeres:

Entre los años 1999 y 2005, más de 6 mil niñas y mujeres fueron asesinadas en distintos puntos de la República. Según datos reportados por el INEGI, cada día murieron cuatro de ellas a consecuencia de la violencia. En 2004, el cúmulo de decesos en esos sectores de la población ascendió a mil 205.

La incidencia más alta se registró durante los años 2000 y 2003 en el estado de México, donde mil 288 niñas y mujeres fueron asesinadas. En el periodo que va de 2000 y 2005, en Veracruz se registraron mil 494 homicidios, de los cuales 411 fueron dolosos y mil 83 culposos. También, en Chiapas, en esos cinco años fallecieron mil 242 niñas y mujeres.

En el estado de Guerrero entre 2001 y 2005, 863 niñas y mujeres perecieron de manera violenta. Y en el Distrito Federal, de acuerdo con cifras del Semefo, fueron asesinadas 743 niñas y mujeres.

En Ciudad Juárez, Chihua-hua, un conteo que se registra en los pasados 12 años determina la muerte de 379 mujeres por homicidios dolosos. En Sonora, durante la década anterior 260 niñas y mujeres perdieron la vida por la misma circunstancia.

En Oaxaca la cifra de muertes femeninas por violencia, durante los cinco años anteriores alcanza los 351 decesos. Y en Baja California 191 fueron registrados por la Procuraduría General de Justicia estatal. En Morelos el cúmulo de muertes alcanza los 125. Tales evidencias fueron acompañadas de una conclusión elaborada por la comisión especial para conocer y dar seguimiento a las investigaciones relacionadas con los feminicidios en la República Mexicana.

"Documentamos que algunas procuradurías respondieron con datos no elaborados, ni siquiera desglosados por sexo; algunas no separaron las cifras de homicidios culposos y dolosos o incluso de accidentes y suicidios. En la comisión especial no se recibió en todos los casos la suficiente información para saber con claridad y certeza cuántas mujeres habían sido víctimas de homicidios dolosos, tampoco recibió detalles sobre el perfil de las víctimas o de los homicidas, los crímenes, sus antecedentes y su situación actual en los procesos".

Sobre el particular, el presidente de la Cámara de Diputados, Alvaro Elías Loredo, sostuvo que la violencia homicida hacia las mujeres no debe considerarse como un fenómeno que encuentre soluciones legislativas o de índole penal; reviste otros aspectos que van de lo social y cultural a lo económico y criminal.

En su turno, la presidenta de la comisión especial, Marcela Lagarde, consideró la violencia contra las mujeres como un problema grave e inadmisible:

"Ni las desapariciones, ni los asesinatos, ni la impunidad han sido identificadas por otras instancias como un grave problema nacional, tampoco se reconoce la responsabilidad del gobierno en los sucesos y en su erradicación. La violencia no es un eje prioritario en nuestro país, ni de la política de desarrollo social y de la gobernabilidad".

Al informar que la investigación diagnóstica se enfrentó con diversos problemas, al grado que "hubo procuradurías que cambiaron sus cifras hasta en tres ocasiones, con el informe ya listo para publicarse, para reducir el número de homicidios", la legisladora advirtió que resulta inaceptable la negativa de las autoridades al desconocer la gravedad de la violencia contra las mujeres.

 
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