Proponen demócratas nueva fórmula para reabrir el debate en el Senado
Sólo ganarán más rechazo, se mofa Tom Tancredo
Los Angeles, 1º de mayo. Mientras el liderazgo demócrata en el Senado ofreció hoy a la bancada republicana una nueva fórmula para reactivar el debate migratorio en la Cámara alta y asegurar la aprobación de una reforma amplia, protegida de enmiendas, Tom Tancredo, líder de la oposición legislativa a la amnistía migratoria en la Cámara de Representantes, advirtió que las manifestaciones masivas y el boicot nacional que realizaron miles de inmigrantes hará que los estadunidenses y los conservadores republicanos se pongan en contra de su causa.
"Cada día que esperamos para reparar nuestro sistema de migración la situación empeora", dijo el legislador por Nevada Harry Reid, ante el pleno del Senado. "Las marchas de este lunes pusieron de manifiesto la necesidad de que el Congreso apruebe este año una efectiva y fuerte ley de migración", indicó el dirigente.
En tanto, el dirigente del Partido Republicano en la Cámara de Representantes, quien se opuso al programa de trabajadores temporales apoyado por el presidente George W. Bush, dijo que las movilizaciones estaban destinadas a fracasar. "No podría estar más feliz (con las protestas), porque cada vez que pasa una de estas cosas las encuestas muestran que más y más estadunidenses se vuelven en contra de los manifestantes y lo que sea que estén tratando de promover", dijo Tancredo a Reuters.
"Mi intuición es que los estadunidenses van a decir: '¿Qué están haciendo todas esas personas con esas banderas que no son las nuestras, y qué es esto de traducir el himno al español?'", señaló, en referencia a las críticas por la versión en español del Star-Spangled Banner.
La Cámara aprobó en diciembre último una ley patrocinada por los republicanos que ajustaría la seguridad a lo largo de la frontera sur y edificaría un muro para detener el flujo de inmigrantes.
Pero Tancredo enfrentó cierta oposición incluso dentro de su partido, en el que algunos, con mirada comercial -entre ellos el propio Bush-, dicen que la economía necesita del trabajo de los inmigrantes para desempeñar las tareas que los estadunidenses no desean realizar.
El republicano advirtió que el Senado parece muy cerca de alcanzar un acuerdo sobre el proyecto de la oposición que garantizaría la amnistía a aquellos que estén ilegalmente en Estados Unidos, pero luego deberá ser aprobado en la Cámara, "lo que se ve muy difícil".
El legislador manifestó que los activistas de los derechos migratorios podrían haberse excedido al "anunciar que iban a poner a Estados Unidos de rodillas", pero logrando un impacto menor.
"Creo que en Denver, Colorado, protestaron 50 mil personas; cuando los Broncos ganaron el Super Bowl, en 1998, hubo 600 mil en las calles", concluyó Tancredo.
Por su parte, Reid insistió en que la reforma que salga del Senado tendrá que ser "cohesiva" e incluir medidas para fortalecer la seguridad fronteriza, un programa de trabajadores temporales y "alentar a los 11 millones de indocumentados a salir de las sombras".
Dio a conocer que en días pasados envió una carta al líder de la mayoría republicana, Bill Frist, en la que reiteró la necesidad de que el Senado reasuma el debate sobre la reforma migratoria a la mayor brevedad.
"Pocos asuntos son tan importantes y ninguno otro está tan avanzado como éste para el debate en el Senado. Ciertamente creo que podemos pasar una buena reforma amplia antes del Día de Recordación (28 de mayo)", indicó.
La propuesta de Reid a Frist consiste en limitar el número de enmiendas a un máximo de 20 por bando, a fin de asegurar que la iniciativa no sea bombardeada con enmiendas que, dijo, buscarían minarla o incluso aniquilar el compromiso alcanzado hasta ahora.