Usted está aquí: viernes 21 de abril de 2006 Sociedad y Justicia La falta de corredores biológicos pone en riesgo las áreas protegidas: Enkerlin

Esas zonas quedarían como islas y la biodiversidad desaparecería, alerta

La falta de corredores biológicos pone en riesgo las áreas protegidas: Enkerlin

ANGELICA ENCISO L.

De no establecerse corredores biológicos en el país, existe el riesgo de que las áreas naturales protegidas (ANP) que aún existen queden como islas, y la biodiversidad desaparezca, advirtió el presidente de la Comisión Nacional de Areas Naturales Protegidas, Ernesto Enkerlin.

Al presentar el segundo informe del Sistema de Información, Monitoreo y Evaluación para la Conservación (SIMEC), dijo que el objetivo es facilitar la toma de decisiones de quienes operan las áreas e identificar las fuentes de amenazas y los mecanismos para enfrentarlas.

Explicó que entre los principales problemas identificados están los incendios forestales y la fragmentación del hábitat, porque muchas áreas están quedando aisladas. "Hay angustia cuando se ven las imágenes de satélite, porque las reservas se observan como estampitas verdes y lo demás se ve deteriorado."

Indicó que si no se establecen corredores biológicos, "las reservas por sí mismas no podrán ser exitosas para conservar la diversidad del país, son una herramienta indispensable, pero insuficiente. La fragmentación es una amenaza". Puntualizó que el único corredor que ha funcionado es el biológico mesoamericano.

Agregó que con las ANP el tema de la depredación de especies de flora y fauna ha ido a la baja, todavía hay problemas como el de la gente que compra animales en protección especial en las regiones de Matehuala, San Luis Potosí, o en los mercados, entre otros.

En entrevista, Enkerlin aseveró que apenas a finales del sexenio pasado se empezó a instalar personal en las áreas y uno de los cambios importantes es que se involucra a las comunidades, aunque no todas están convencidas.

En el informe, sostuvo que durante los cinco años pasados se registró un avance significativo en la superficie decretada como protegida, la cual era de 14 millones de hectáreas en 2001, y en 2005 llegó a 18 millones 867 mil 731 hectáreas, casi 10 por ciento del territorio nacional.

Dijo que en 2002 por conceptos de visitas a las reservas se recaudaron 14 millones de pesos y para 2005 se tenía programado llegar a 39 millones de pesos, pero debido a los daños que causó el huracán Wilma, sólo se obtuvieron 33 millones de pesos.

De acuerdo con lo establecido en el SIMEC aún se tienen diversos retos para el futuro en los subsistemas de información, monitoreo y evaluación, entre ellos mejorar el proceso de transferencia de datos para mantener actualizada su base.

En relación con los daños ambientales que ocasionaría la construcción de un muro fronterizo, sostuvo que habría efectos negativos para especies que transitan cotidianamente en la frontera norte del país; es el caso del coyote, la zorra y los venados.

 
Compartir la nota:

Puede compartir la nota con otros lectores usando los servicios de del.icio.us, Fresqui y menéame, o puede conocer si existe algún blog que esté haciendo referencia a la misma a través de Technorati.