Usted está aquí: martes 14 de marzo de 2006 Política Tengo pruebas para que se castigue a Marín: Cacho

La periodista presentó ante la PGR denuncia de hechos

Tengo pruebas para que se castigue a Marín: Cacho

La querella incluye a la procuradora, la juez y la agente del MP

ALFREDO MENDEZ

''El gobernador de Puebla, Mario Marín Torres, y sus funcionarios cómplices deben ser castigados penalmente, pues contamos con las pruebas suficientes para que eso ocurra'', aseguró ayer la periodista Lydia Cacho, minutos después de haber presentado una denuncia de hechos en la Procuraduría General de la República (PGR) por la presunta confabulación de servidores públicos poblanos con el empresario textilero Kamel Nacif, quienes buscaron asegurar la aprehensión de la comunicadora, en diciembre pasado, en represalia por haber publicado el libro Los demonios del edén, sobre prácticas de pederastia.

Sin querer entrar en detalles sobre las pruebas ofrecidas al Ministerio Público Federal, por recomendación de su abogado, Guillermo Cuen, Cacho indicó a decenas de reporteros que se dieron cita en la PGR que las documentales y testimoniales ofrecidas ''corresponden a una gran cantidad de gente en Puebla, que incluso pertenece al servicio público de la entidad, que relatan casos similares al mío de violación a derechos humanos y garantías constitucionales''.

A la presentación de la querella acudió la fiscal de la PGR para la Atención de Delitos contra las Mujeres, Alicia Elena Pérez Duarte, quien antes de entrevistarse con la escritora en la dependencia aseguró a los comunicadores que el caso de Marín Torres es complejo, pero ''que no quede lugar a dudas que no habrá presos políticos; se actuará conforme a derecho y contra quien sea''.

La funcionaria aclaró que en las próximas horas la oficialía de partes de la PGR turnará el caso a una fiscalía especializada, ya sea a la de periodistas, encabezada por David Vega Vera, o a la que dirige Pérez Duarte. Inclusive, no descartó que la querella de Cacho Ribeiro se acumule con una parte de la denuncia que el pasado 20 de febrero presentaron diputados federales del PRD, ya que se relaciona con los mismos hechos.

-¿Con esta denuncia se fortalecen las pruebas para castigar a los responsables del acoso a la periodista? -se le preguntó.

-Sí, claro, pero antes vamos a revisarla minuciosamente; es un caso muy complejo que tiene presión por todas partes.

-¿Vamos a ver en algún momento presos políticos?

-Con Alicia Pérez Duarte no hay presos políticos.

Las violaciones

Atenta con sus compañeros de oficio que acudieron a la PGR, Lydia Cacho una y otra vez explicó que a quienes intentaron perjudicarla les imputa los delitos de cohecho, abuso de autoridad, tráfico de influencias, tentativa de violación, falsedad de declaración, amenazas y lo que resulte por la violación a sus garantías constitucionales y a sus derechos humanos. En su querella señaló como presuntos responsables de esos cargos al gobernador Mario Marín Torres; a la procuradora de esa entidad, Blanca Laura Villeda Martínez; a la juez local Rosa Celia Pérez González; a Kamel Nacif, conocido como el rey de la mezclilla; al empresario Hanna Naked Bayed (Juanito); a la agente del Ministerio Público Rosa Aurora Espejel, y a los policías judiciales José Montaño y Jesús Pérez.

Además de los testimonios, la periodista ofreció como prueba las grabaciones de las llamadas telefónicas entre Nacif y Marín, en las que se evidenció que el empresario textilero se valió del apoyo del titular del Ejecutivo estatal para lograr la detención. En las grabaciones se demostró además que Nacif es uno de los patrocinadores desde México de la defensa legal de Jean Succar Kuri, a quien la PGR investiga desde 2004, por ser uno de los líderes de una banda dedicada a la pornografía infantil en varios países.

En una especie de venganza por la publicación del libro Los demonios del edén, en el que se revelan declaraciones ministeriales que señalan a Kamel Nacif como presunto pederasta, éste denunció penalmente a Cacho Ribeiro -a quien acusó de calumnia y difamación- y recurrió a su ''amigo'', el gobernador poblano, para asegurar la aprehensión de la escritora, en diciembre pasado.

Ayer, después de haber presentado su denuncia, Lydia Cacho dijo confiar en que la Procuraduría General de la República resolverá conforme a derecho y revisará minuciosamente el caso a fin de que sus agresores sean castigados. Refirió que es necesario que la PGR analice y determine la veracidad de la cinta en la que se escucha a Mario Marín y Kamel Nacif confabular en su contra.

A su vez, el penalista Guillermo Cuen, defensor de la querellante, indicó que recurrirán a todas las instancias necesarias para esclarecer el caso y que se castigue a las personas que han confabulado contra su cliente. ''Esas personas han caído en falsedad de declaración y otros ilícitos como cohecho, abuso de autoridad, tráfico de influencia y otros'', indicó.

 
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