DIRECTORA GENERAL CARMEN LIRA SAADE
   

DIRECTOR FUNDADOR CARLOS PAYAN VELVER
SUPLEMENTO MENSUAL  DIRECTOR: IVAN RESTREPO  
EDICIÓN: LAURA ANGULO   LUNES 31 DE OCTUBRE 2005 
NUMERO ESPECIAL


  Portada

Presentación

El Sistema Arrecifal Veracruzano, un ecosistema marino único
Guillermo Horta-Puga

La isla en disputa
Gabriela Cortés Delgado

La tortuga carey, una joya del mar
Raúl de J. González Díaz Mirón

El sistema de agua y drenaje, un caos en la Ciudad de Veracruz
Gabriela Cortés Delgado


Correo electrónico:

[email protected]

 

  

El Sistema Arrecifal Veracruzano, un ecosistema marino único

Texto y fotos: Guillermo Horta-Puga

Invemar, Ubipro, Fesi Iztacala Universidad Nacional Autónoma de México
Correo electrónico: [email protected]

El origen


FOTO Juan Manuel Vargas

Hace unos 18 mil años nos encontrábamos en la etapa más fría del último periodo glacial, cuando los hielos polares aumentaron su extensión y volumen a expensas del agua de los océanos, lo que produjo una drástica disminución del nivel del mar a escala global.

Este fenómeno también afectó al Golfo de México, donde el nivel decreció cerca de 120 metros, es decir, la línea de costa se situó mucho más allá de lo que la podemos observar actualmente, por lo que el litoral adyacente quedó al descubierto y a merced de los procesos naturales que moldean la superficie del planeta, como son vientos y ríos que la van desgastando.

Así, el suelo de esa franja de terreno ganado al mar se fue perdiendo producto de la erosión y quedó al descubierto el basamento rocoso que forma su base. Con el paso del tiempo, terminó el periodo glacial y las condiciones climáticas fueron más cálidas por lo que los hielos en los polos comenzaron a derretirse y el mar, poco a poco, fue recuperando el terreno perdido.

Hace unos 9 mil a 11 mil años, frente a lo que hoy es el puerto y ciudad de Veracruz, a una profundidad de 30 a 40 metros, posiblemente quedaron expuestas numerosas zonas rocosas que al ser cubiertas nuevamente fueron colonizadas por corales formadores de arrecifes. De esa manera se inició la construcción del Sistema Arrecifal Veracruzano (simplemente SAV), que actualmente está constituido por más de 20 arrecifes.

Es muy importante señalar que sólo en contadas localidades del Golfo de México fue posible que se formaran arrecifes coralinos, como son los Flower Garden Banks en Texas, Isla Lobos frente a Tuxpan, o Cayo Arcas, Triángulos, Cayo Arenas y Alacrán del Banco de Campeche, ya que no todo el litoral reunía las condiciones propicias. Además, el SAV es un ecosistema arrecifal único por el hecho de haberse desarrollado en una zona influenciada por:

    1. Su cercanía a la desembocadura de los ríos Jamapa, Papaloapan y Actopan, ya que los corales son muy susceptibles a la presencia de material suspendido en el agua, y
    2. La presencia de los "nortes", masas de aire frío que durante el invierno disminuyen la temperatura a niveles críticos que pocos corales pueden resistir.

Características de los arrecifes del SAV

Los corales duros o pétreos, científicamente conocidos como escleractinios, son organismos coloniales que tienen la capacidad de formar un esqueleto carbonatado. Una colonia puede vivir cientos de años y crecer en promedio de 1 a 2 centímetros anualmente. Así podemos encontrar ejemplares con poco más de 4 metros de altura y diámetro.

Dado que los corales tienden a ocupar todo el espacio disponible, pronto cubren casi totalmente el fondo. Al morir, el esqueleto se transforma en roca coralina que a su vez sirve de sustrato para que un nuevo coral se asiente y prospere. De esa manera, poco a poco se va construyendo el arrecife, usando los corales como bloques de construcción.

En el caso de los arrecifes del SAV, estos son monumentales edificaciones vivientes, de cerca de 30 metros de altura por uno a dos kilómetros de largo y hasta uno de ancho, šimaginen cuántas toneladas de corales fueron necesarias para construir el arrecife!

Este proceso se llevó a cabo durante los últimos miles de años, por lo cual no es aventurado suponer que estos arrecifes crecieron cerca de tres a cuatro metros de altura por cada mil años, un ritmo de crecimiento muy alto comparado con la mayoría de los arrecifes a nivel mundial.

Por lo anterior, los arrecifes del SAV están considerados como el sistema arrecifal más extenso y desarrollado del Golfo de México, rivalizando con cualquiera de los arrecifes del Caribe.

Otra característica importantísima de los arrecifes coralinos es la presencia de miles de especies de seres vivos, incluidos algas, esponjas, anémonas, corales, gusanos, caracoles, almejas, crustáceos, estrellas de mar, erizos de mar y peces. Es tal la diversidad y profusión de especies, que se le considera el ecosistema marino con mayor diversidad.

Otro aspecto que debe ser considerado es el hecho de que los ecosistemas arrecifales del Golfo de México forman un corredor biológico, donde las especies marinas transitan y se establecen. La ruta de migración corre desde el Banco de Campeche hacia Texas, pasando por los arrecifes veracruzanos gracias a las corrientes marinas. Es como una cadena biológica cuyos eslabones son los arrecifes mismos. Si uno de estos se rompe, se pierde la continuidad, afectando a todos los integrantes.

Conservación

Como se ha mencionado, es altísima la importancia del Sistema Arrecifal Veracruzano, por lo cual resulta imprescindible su adecuado manejo y conservación, de ahí que se le haya declarado parque nacional desde 1992.

Sin embargo, el SAV, tristemente, es también considerado a nivel regional como uno de los arrecifes más amenazados por las actividades humanas.

La contaminación, la pesca excesiva, la extracción de roca coralina, el turismo no responsable, el anclaje indiscriminado de embarcaciones menores y el encallamiento de buques de gran calado son amenazas reales que impactan fuertemente el ambiente causando el deterioro del ecosistema, que se refleja a través de la modificación del paisaje natural y el cambio en la composición y abundancia de las especies marinas.

Es momento de que la sociedad en su conjunto tome conciencia de la importancia de preservar nuestros recursos naturales, y se comprometa a colaborar, en la medida de sus posibilidades, para la conservación de este ecosistema único: el Sistema Arrecifal Veracruzano.