Preocupa a la región la reaparición de una cepa que en 1918 causó millones de muertes

Alerta en Europa por la gripe aviar; surgen brotes en Rumania y Turquía

Sacrifican más de mil aves en Bucarest; en Ankara aíslan 2 mil pollos

La mayoría de las naciones del continente, sin medios, recursos ni fármacos para enfrentar una pandemia

STEPHEN CASTLE THE INDEPENDENT

Bruselas, 9 de octubre. Europa fue puesta este domingo en alerta continental contra la gripe aviar, en tanto Turquía y Rumania aislaron cientos de aves y pusieron en cuarentena pueblos enteros después de que se informó de brotes en ambos países.

Funcionarios de salud en todo el continente incrementaron la vigilancia en torno a una cepa de la enfermedad que podría mutar en otra que se propaga con facilidad entre humanos y podría desatar una pandemia.

El brote de la llamada influenza española, ocurrido en 1918 -la cual ha sido ligada a la cepa actual- causó la muerte de entre 20 y 40 millones de personas en todo el mundo.

En siete localidades de Rumania han ocurrido muertes sospechosas de aves en días recientes, y se han sacrificado más de mil animales. Entre tanto, Turquía puso en aislamiento unos dos mil pollos y pavos después de informar de su primer brote de gripe aviar -la cual comúnmente es propagada por aves migratorias- en una granja cercana al mar Egeo.

Hasta el momento no se han producido en Europa casos confirmados de la cepa H5N1 del virus, que ha matado a 65 personas y millones de aves en Asia de 2003 a la fecha. Rumania realiza aún pruebas virológicas y la Comisión Europea indicó este domingo que no se ha confirmado formalmente ningún caso de gripe aviar de cualquier descripción.

Hace dos años, un brote de la enfermedad en Holanda condujo al aislamiento de 30 millones de aves y devastó la industria avícola de ese país. Apenas hace poco tiempo los funcionarios de salud de ese país levantaron las draconianas restricciones, destinadas a prevenir el contacto con aves migratorias.

Inermes ante una contingencia

Sin embargo, en toda Europa crece la inquietud por la falta de preparación ante la eventualidad de una pandemia si arriba la cepa H5N1.

La semana pasada el Consejo de la Asamblea Parlamentaria Europea deploró la falta de preparación de la mayoría de las 46 naciones europeas que la forman y señaló que hay una "carencia flagrante" de vacunas y medicamentos antivirales para combatir una pandemia. Señaló que los países que están en mayor riesgo se enfrentan solos a la amenaza, "sin los recursos financieros necesarios para comprar vacunas antivirales y medicamentos con el fin de construir reservas adecuadas".

En Turquía el periódico Hurriyet informó que se sacrificarían hasta 16 mil animales y que el distrito afectado de Kizisa permanecerá en cuarentena durante 21 días. En esa zona están matando perros callejeros como medida de precaución.

Funcionarios indicaron que los pavos infectados en Kizisa probablemente contrajeron la enfermedad de aves migratorias procedentes de los montes Urales que se dirigían a un parque natural cercano, llamado Paraíso de las Aves. Hurriyet reportó que Mehmet Essen, propietario de la granja afectada, ahora teme por su propia salud. "Lloré cuando vi morir a mis pavos. No puedo olvidar esos momentos... Pero ahora temo por mí mismo y por lo que pueda ocurrir con mi salud. No puedo acercarme a mi mujer y mis hijos", declaró Essen al periódico.

Aquí en Bruselas, Philip Todd, vocero de la Comisión Europea, expresó: "Estamos en un estado acentuado de vigilancia. Hemos adoptado medidas de revisión de pollos y aves silvestres. Todos los estados miembros llevan a cabo vigilancia conjunta con la Unión Europea.

"A todos los estados miembros -añadió- se les ha pedido incrementar las inspecciones fronterizas de aves vivas y muertas y se les ha dado instrucciones de incrementar las medidas de higiene para evitar la propagación de la enfermedad. Estas medidas se tomaron en respuesta a la propagación de la influenza aviar hacia Liberia y Kazajstán. Trabajamos en conjunto con los estados miembros para prepararnos a la eventualidad de una pandemia de influenza y brindamos apoyo y coordinación."

El ministro de Agricultura de Rumania, Gheorghe Flutur, señaló que hasta ahora los científicos han sido incapaces de aislar el virus en las aves sospechosas. Las pruebas son complejas, porque las aves que han desarrollado anticuerpos contra la gripe aviar en algún momento de su vida podrían no haber contraído la enfermedad. De hecho, tres aves que dieron positivo a la gripe aviar este sábado en la aldea de Smardan no murieron de ese mal.

Como la situación en Rumania permanecía confusa, la Comisión Europea indicó que este lunes enviará expertos a ese país para que ayuden a evaluarla con certeza.

El delta del Danubio, que da al mar Negro, contiene las mayores zonas húmedas de Europa y es una importante zona migratoria de aves silvestres procedentes de Rusia, Escandinavia, Polonia y Alemania. La mayoría de esas aves se trasladan a regiones más cálidas de Africa del Norte, entre ellas el delta del Nilo, para pasar allí la temporada invernal.

Bruselas apremia a los gobiernos a prepararse para el peor escenario, y a acumular fármacos antivirales y generar más vacunas. Sin embargo, la Comisión Europea tiene poderes limitados, pues la responsabilidad primaria reside en los estados miembros.

La Organización Mundial de la Salud advirtió el mes pasado que la influenza aviar evolucionaba hacia una forma que podría ser transmisible entre humanos y que el mundo no tenía tiempo que perder ante la urgencia de prevenir una pandemia.

© The Independent

Traducción: Jorge Anaya