Demanda creatividad e intrepidez a obispos mexicanos

"Aprovechar los medios", sugiere Ratzinger al clero

Les pide coadyuvar en la consolidación democrática

ALMA E. MUÑOZ

El papa Benedicto XVI convocó a los obispos mexicanos a brindar "una respuesta iluminadora" a los anhelos de "consolidar una cultura y unas instituciones democráticas, económicas y sociales que reconozcan los derechos humanos del pueblo". Los exhortó a aprovechar la "nueva cultura marcada por los medios de comunicación", dentro de una sociedad "plasmada en muchas y diversas realidades, algunas muy buenas y prometedoras, y otras más complejas".

Luego de recibir de los prelados, encabezados por el arzobispo de Chihuahua, José Fernández Arteaga, un informe sobre problemáticas en México -inseguridad, emigraciones y olvido de principios, entre otros-, Joseph Ratzinger resaltó el proceso de transición en este país, "caracterizado por la aparición de grupos que a veces de manera más o menos ordenada buscan nuevos espacios de participación y representación".

Muchos de ellos, les dijo, "propugnan con particular fuerza la reivindicación en favor de los pobres y de los excluidos del desarrollo, particularmente de los indígenas", por lo que deben "encontrar eco y una respuesta iluminadora de la acción pastoral de la Iglesia".

Durante la cita con integrantes de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) en Castelgandolfo, residencia papal de verano, el jefe del Estado vaticano expuso que en la tarea evangelizadora hay que ser creativos. "La sociedad actual cuestiona y observa a la Iglesia, exigiendo coherencia e intrepidez en la fe", expuso.

Expresó particular preocupación por los jóvenes, "que se encuentran ante una sociedad marcada por un creciente pluralismo cultural y religioso". Pero, además, porque se enfrentan "a veces muy solos y desorientados a corrientes de pensamiento según las cuales, sin necesidad de Dios e incluso contra Dios, el hombre alcanza su plenitud a través del poder tecnológico, político y económico".

Ratzinger subrayó ante los visitantes mexicanos, entre los que figuraron religiosos de Durango, Guadalajara y Hermosillo, la riqueza cultural que encierran los 400 institutos de vida consagrada, fundados muchos de ellos en México, en su mayoría dedicados a la educación.

La Iglesia en México, apuntó Benedicto XVI -al finalizar las audiencias del primer grupo de religiosos que informaron sobre la situación de sus regiones pastorales, como parte de la visita ad limina apostolarum-, "refleja el pluralismo de la sociedad, plasmada en muchas y diversas realidades". Y planteó: "Los obispos han de favorecer unos procesos pastorales orgánicos (sic) que den mayor sentido a las manifestaciones derivadas de una mera tradición o costumbre".

Agregó: "Por encontrarnos en una nueva cultura marcada por los medios de comunicación social, la Iglesia en México ha de aprovechar la colaboración de sus fieles, la preparación de tantos hombres de cultura y las oportunidades que las instituciones públicas concedan en los mismos. Poner el rostro de Cristo en ese ambiente mediático requiere un serio esfuerzo formativo y apostólico que no puede postergarse".

Tras el mensaje papal, difundido ayer por la CEM, el organismo católico enalteció que Ratzinger les anime a "enfrentar la situación de México como un reto que requiere una formación integral en todos los ámbitos de la Iglesia". En nombre de los prelados, el arzobispo de Chihuahua, José Fernández Arteaga, manifestó a Benedicto XVI "plena comunión", y resaltó como una de las principales preocupaciones de los pastores las actividades proselitistas de otras creencias, confesiones o religiones, así como constatar "la existencia del consumo de droga".

Expresó que en México se vive una delicada situación de inseguridad que degenera en otros problemas: "Nos vemos abrumados por la falta de seguridad y las consecuencias criminales de todo tipo: muertes, secuestros, desfalcos, rapiñas, robos, torturas y hasta el olvido de principios que son fundamento de la familia humana y cristiana".

Fernández Arteaga añadió ante el obispo de Roma: "Este año y el próximo serán difíciles y especiales con motivo de las elecciones. Nos esforzamos porque eso nos haga crecer con actitudes de solidaridad y por el bien común".