Usted está aquí: miércoles 7 de septiembre de 2005 Política La profesora compara a Mariano Palacios con Victoriano Huerta

Presenta segundo recurso de queja ante el TEPJF

La profesora compara a Mariano Palacios con Victoriano Huerta

RENATO DAVALOS

La secretaria general priísta, Elba Esther Gordillo, presentó un segundo recurso de queja ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TPJF) en el que definió la sesión del Consejo Político Nacional en que se decidió la llegada de Mariano Palacios a la presidencia partidista como una "maquinación fraudulenta, espuria e ilegal". Compara el procedimiento de "relección" de Palacios Alcocer con la asunción del "traidor Victoriano Huerta".

Se trata del "secuestro del partido más grande de México", por un puñado de seguidores de Roberto Madrazo, establece en el documento de 90 páginas remitido al tribunal con fecha 5 de septiembre, que se anunció llegaría a la sede nacional priísta a las 15 horas, aunque se presentó a las 18. El documento tiene acuse de recibo en el tribunal poco antes de las 17 horas de ayer.

Gordillo instó a los magistrados a que resuelvan antes del 15 de septiembre, fecha del previsible lanzamiento de la convocatoria para la elección interna tricolor a la candidatura presidencial. También requiere que dicten las medidas para evitar la aplicación de los acuerdos del consejo.

Si la resolución se produce después, el proceso interno se vería afectado en sus tiempos en detrimento del PRI, y con perjuicios de imposible reparación, "algo ajeno y absolutamente contrario a los intereses de la promovente. Mi designación como presidenta no está sujeta a prelación, votación o aprobación del consejo", aclara en el texto. Mi derecho a ser presidenta interina, puntualiza, es un efecto directo, por ministerio de ley, de la ausencia definitiva del presidente del Comité Ejecutivo Nacional.

''No soy yo, ni mucho menos este tribunal, quien pone en riesgo al PRI. No es una presidencia interina de 60 días lo que está en entredicho o pleito. Es el secuestro del partido de partidarios madracistas que pretenden monopolizar la selección de candidatos por mayoría relativa y de representación proporcional.''

Además, dijo, ''simulan procesos internos de selección de candidatos ajenos a la debida equidad''.

El tribunal está a tiempo de obrar "sin menoscabo de nadie", asienta. "Hago votos porque este altísimo tribunal vea en este caso la muy valiosa oportunidad para que la nación advierta que está en su papel, en todo momento, para resolver y garantizar su anhelo de democracia y justicia. Sólo este tribunal puede detener a tiempo lo que mal se ha hecho", añade.

El documento, entregado por los abogados María José García Castillo y José Manuel Tapia Acebrás, indica que "yo, Elba Esther Gordillo, soy dirigente y no funcionaria del PRI. Mis facultades no se derivan ni pueden ser modificadas por el CPN, porque emergen de la soberanía de la mayoría de los militantes. No están condicionadaas a asistir a ningún evento".

La sesión del consejo, argumenta, obedeció a la estrategia "dolosa e intencional de Roberto Madrazo para colocar a la militancia y a los tribunales frente al dilema de escoger entre la defensa de la legalidad y contar con candidato presidencial. "El mensaje fue: si te quejas en los tribunales con los tiempos encima, el PRI puede quedar sin candidato y estarías poniendo en riesgo al partido".

Casualmente, ironiza, Palacios firmó una convocatoria a la sesión extraordinaria convocada originalmente para tratar temas presupuestales. "Casualmente no estuvo José Ramón Martell para ejercer la prelación. Dicen que por haber atendido una necesidad fisiológica, justo en ese instante, aunque las documentales fotográficas lo desmienten. Casualmente, no hubo necesidad de utilizar boletas ni urnas, pues la propuesta ya estaba escrita y firmada por Roberto Madrazo Pintado''.

Palacios Alcocer, a pesar de "ser ilegítimo", debió haber cumplido su obligación de lanzar una convocatoria, pero incumplió con el estatuto. Tampoco se contempló un plazo entre la renuncia y la elección de un presidente. Bastaron 15 minutos, subraya. Además, Palacios violó el principio constitucional antirreleccionista, pues ya había ocupado el cargo del 11 de septiembre de 1997 al primero de abril de 1999.

 
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