Seguridad, justicia y Pemex, otros temas relevantes

Prioridad de senadores del PRI, la contrarreforma al ISR

ANDREA BECERRIL

Inmersos en la crisis interna que vive su partido, los senadores del PRI discutieron ayer la agenda legislativa que impulsarán en el periodo de sesiones que comenzará el próximo primero de septiembre. Sus prioridades están en el paquete de reformas en materia de justicia, las modificaciones al impuesto sobre la renta (ISR), que han provocado descontento entre los trabajadores, y el régimen fiscal de Pemex, que el presidente Vicente Fox amenaza vetar.

Por la mañana, el coordinador Enrique Jackson Ramírez comentó que la situación por la que atraviesa el PRI "es en todos sentidos inoportuna y desafortunada", pero "los senadores continuarán haciendo su tarea, que es la de legislar".

Sostuvo que los senadores priístas piensan en los asuntos del país y de la gente, no sólo en lo que ocurre en el PRI. Sin embargo, la plenaria, programada para mediodía, se pospuso hasta la tarde, ya que Jackson y otros legisladores se trasladaron a la sede del Revolucionario Institucional, donde se discutía el relevo en la dirigencia nacional.

Fue cuando después de las cinco en que los senadores priístas comenzaron la discusión de la agenda. De entrada, Jackson les informó del acuerdo para que Sergio García Ramírez sea quien encabece al PRI y decidieron reunirse hoy por la mañana, antes de la instalación del Senado, para discutir el tema con mayores datos, porque no está claro si éste aceptó el encargo.

Decidieron elegir como coordinador del sector popular del grupo parlamentario al senador Adrián Alanís Quiñones.

Ya metidos en temas legislativos, el debate se centró en el nuevo régimen fiscal de Pemex, que Fox no ha promulgado. Decidieron por ello estar muy pendientes, ya que se trata de una reforma fundamental que, de ser vetada por el Ejecutivo, necesitaría las dos terceras partes de votos en ambas cámaras para aprobarse nuevamente.

Los senadores del PRI analizaron la reforma al ISR que se aprobó en diciembre del año pasado y que habrá de entrar en vigor en enero del 2006, pero que es impugnada por sindicatos y centrales obreras, por considerar que lesiona gravemente a la mayoría de los trabajadores, al gravar sus prestaciones sociales.

Hubo opiniones divididas y el acuerdo fue esperar la decisión de los diputados, quienes pueden modificar la iniciativa durante la revisión de la miscelánea fiscal. Los priístas llevan también en su agenda reformas al federalismo y otras en materia política.

Por separado, la coordinadora del grupo parlamentario del PVEM, Gloria Lavara, informó que impulsarán 19 iniciativas de ley en torno a temas relevantes, entre ellas el paquete de reformas en materia de justicia y seguridad pública y una modificación para incluir un impuesto ambiental a las tarifas eléctricas domésticas.

Lo recaudado se aplicaría directamente al apoyo de proyectos de generación de energía a partir de fuentes renovables no contaminantes. La legisladora sostuvo que el gravamen sería "insignificante e imperceptible" para los usuarios, ya que son sólo unos centavos al mes los que pagarían los consumidores domésticos de electricidad.

Acompañada de las demás legisladoras de su bancada, Lavara comentó que otra de las iniciativas que impulsarán es que los distribuidores de vehículos automotores estén obligados a reportar ante la Secretaría de Hacienda las ventas de unidades de lujo, con el propósito de que la autoridad pueda detectar adquisiciones sospechosas y combatir el lavado de dinero.

En tanto, la fracción del PAN concluyó su reunión plenaria en Torreón, Coahuila, con la decisión de promover 16 iniciativas de ley, entre ellas el paquete de reformas constitucionales y legales en materia de justicia penal y seguridad pública, la Ley de Competencia Económica, la Ley de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria y reformas a la Ley Federal del Trabajo.